El sector de los videojuegos en España cuenta con más de 20 millones de jugadores, de los cuales el 49% son mujeres, según los datos aportados por la Asociación Española de Videojuegos (AEVI).
Sin embargo, la presencia femenina en el desarrollo de videojuegos sigue siendo minoritaria, representando solo el 26,4% de los trabajadores del sector.
En este contexto, la presencia de empresarias líderes en el sector, como Ainhoa 'Husky' Salsidua, Belén Gómez y Alba Martín; ofrecen una serie de perspectivas sobre el papel de la mujer y los desafíos que enfrentan en el mundo del videojuego.
En sus experiencias, encuentran desafíos como la necesidad de hacerse un hueco y ser escuchadas, así como un trato que denuncian, es desigual en entrevistas y la persistencia de estereotipos en la representación de la mujer en los videojuegos. Sin embargo, también notan algunos cambios positivos en la industria, con personajes femeninos más diversos y roles protagonistas más allá de los estereotipos de género.
Belén Gómez, de Divertifica, señala que la baja representación femenina en áreas como el diseño y la programación comienza en la infancia, influenciada por estereotipos familiares y sociales. Por su parte, Ainhoa Salsidua, de Zaunka, destaca que la competición de videojuegos es más mixta de lo que se percibe, aunque aún está lejos de la paridad.
Alba Martín, de Meraki A&A, observa un creciente peso de la mujer en el desarrollo de videojuegos y aboga por que se establezca una igualdad de condiciones.
Además, Salsidua subraya la importancia de la inclusión y la creación de experiencias diversas, señalando que la industria aún tiende a seguir caminos conocidos y a excluir a ciertos públicos.
Las tres empresarias, a través de sus empresas, buscan impulsar la visibilidad de las mujeres y otros colectivos marginados en el sector y quieren abogar por una industria más inclusiva y diversa.