Como viene siendo tradición a lo largo de los años, este viernes 20 de diciembre llegará la Luz de Belén a la parroquia del Sagrado Corazón, donde se repartirá y pondrá rumbo al Nacimiento del Foso del Hornabeque. Un acto muy querido en la sociedad melillense y que servirá para iluminar los corazones de muchos melillenses durante la festividad cristiana de la Navidad.
La Luz de la Paz proviene de Belén, el lugar de nacimiento de Jesús. Los encargados de traerla siempre son los Scout de Vélez-Málaga, como cada año, que viajan en barco hasta Melilla. Llega en un farol muy bien conservado, que es alimentado con cera líquida y portado en una caja protectora para evitar que se apague durante el largo trayecto que realiza.
Una vez en la ciudad autónoma, el vicario episcopal Eduardo Resa recibe a los Scouts y a la Luz, quienes la guardan hasta que llegue la hora de repartirla entre las personas que quieran llevarla a sus hogares. Una vez repartida, se realizará la tradicional caminata por los asistentes hacia el Foso del Hornabeque, en la que se irán cantando villancicos con el coro de la iglesia, para iluminar el Nacimiento y depositar allí este símbolo de paz.
Se trata de una celebración que está repleta de simbolismo y emoción con el claro mensaje de que reine la paz donde esté la luz. Muy necesario sobre todo en estos tiempos convulsos. Las personas que deseen tener ese símbolo en su casa podrán acudir a cualquiera de las parroquias de la ciudad, donde la encontrarán a su disposición para compartirla en estas fechas especiales de la Navidad.
Tradición
Cada año, semanas antes de Navidad, un niño viaja a la gruta donde, según la tradición, nació Jesús en Belén y enciende una vela que simboliza la Luz de la Paz. Después la luz se distribuye mediante representantes scouts de países de Europa, como España.
La distribución de la Luz de la Paz se hace desde Viena. Esta tradición consiste en llevar por todo el mundo el fuego que se enciende en el lugar donde nació Jesús. En una ceremonia, la llama se reparte entre aquellos hogares que deseen tenerla como símbolo de paz en la tierra.