El acuartelamiento Millán Astray acogió ayer el acto castrense, en recuerdo del alistamiento del primer voluntario, y que fue presidido por el general jefe del Estado Mayor del Ejército, Jaime Domínguez Buj.
La actual situación económica obliga a hacer “mayores sacrificios” y gestionar los recursos con mayor “celo”. Ese fue el mensaje que el coronel jefe de La Legión en Melilla, Enrique Tovar, envió a la tropa reunida en el Acuartelamiento Millán Astray que conmemoró ayer el 92º aniversario de la unidad.
Así pues, conscientes de la crisis económica, La Legión no deja de mirar al futuro, ya que “la era de la globalización, de amenazas, donde todo es incierto, donde todo evoluciona de forma rapidísima, afecta inmediatamente al entramado social y político”. Por ello, dijo Tovar, esta unidad, una de las más condecoradas de las Fuerzas Armadas españolas, “cobra especial relevancia por distintos aspectos que la hacen distinta y está especialmente preparada para los retos futuros”.
Al hilo, Tovar destacó que una de esas características especiales de La Legión es la modernidad. “Desde que nació, ha estado innovando constantemente con la uniformidad, con los equipos de combate, con la evolución constante de las tácticas y creando las primeras unidades paracaidistas y otras de operaciones especiales”. Según el coronel jefe del Tercio, la última de las adaptaciones de la unidad ha sido la modernización de sus técnicas de combate aprovechando la evolución y ventajas que ofrecen las innovaciones tecnológicas.
Los valores de La Legión
Junto a ello, Tovar destacó la capacidad de adaptación y operatividad de los legionarios para afrontar los nuevos retos y amenazas, “lo que nos da una gran fe en el futuro”. Pero, por encima de todo ello, La Legión no deja de ser una “gran familia” en la que unos cuidan de otros. “Absolutamente todos sois esenciales”, insistió el coronel jefe, quien además subrayó que los valores legionarios son los que cohesionan la Unidad. “La amistad y el compañerismo son base de convivencia. La dureza y el sufrimiento como método y la trascendental y férrea disciplina para no dudar jamás ante situaciones de tensión”, apuntó.
En este 92º aniversario, Tovar no pasó por alto la esencia de la celebración, destacando el “error de cálculo” de Millán Astray y sus colaboradores, pues esperaban un alistamiento diario de entre ocho y diez voluntarios y en pocos días alcanzaron los 400. A pesar de la escueta Real Orden de la creación de la Unidad, firmada por el rey Alfonso XIII en enero de 1920, su trascendencia fue grande. “Jamás pensaron en la explosión del alistamiento y a los tres días de darse publicidad a la creación del Tercio, se alistaron 400 voluntarios. La primera expedición procedente de Barcelona la conformaron 200 catalanes”, resaltó Tovar.
El acto castrense comenzó a las 12:30 horas y fue presidido por el general jefe del Estado Mayor del Ejército (GEJEME), Jaime Domínguez Buj, acompañado del comandante general de Melilla, Álvaro de la Peña, y autoridades civiles, como el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda.
Condecoraciones
Después de la formación de la tropa en el patio del acuartelamiento, la incorporación de los guiones y la enseña nacional, Domínguez Buj pasó revista dando así inicio a la celebración del 92º aniversario de La Legión. Como cada año, el aniversario de la Unidad sirvió también para entregar las condecoraciones a aquellos soldados que durante el año han destacado en el ejercicio de sus funciones. Así, se entregó la placa de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo a un suboficial, la encomienda del mismo nombre a un oficial, la cruz de San Hermenegildo a siete suboficiales y la del Mérito Militar a dos oficiales, cinco suboficiales y 16 soldados de Tropa. También se entregaron las cruces de oro, plata y bronce a la constancia en el servicio a 11 soldados de Tropa.
Como novedad este año, la Unidad despidió a varios oficiales y suboficiales, que pasan a la reserva. Los tenientes José Antonio Abad, José Luis López de la Manzanara, José Manuel Marcos e Ignacio Escudero y el subteniente Domingo Marín simbolizaron su cede del servicio activo besando la enseña nacional.
Continuando con el apartado de condecoraciones y reconocimientos, se nombró Legionario de Honor al director de la Escuela Taller del Patrimonio, Luis Manuel Cardalliaguet, por su vinculación a la unidad y se entregaron diversas distinciones a la Cofradía del Cristo de la Buena Muerte (Mena), Señor de la Caridad (Córdoba), el Mayor Dolor (Antequera), Jesús Nazareno (Alhaurín el Grande), Cristo de la Vera Cruz (Alhaurín de la Torre) y las agrupaciones cofrades de Jesús de la Flagelación y Jesús Nazareno de Melilla.
Tras la alocución del coronel jefe de La Legión, la unidad militar ha rendido homenaje a sus compañeros fallecidos en acto de servicio, colocando una corona de laurel a los pies del Cristo de la Buena Muerte, mientras guiones y banderines rendían honores al son del ‘Novio de la Muerte’.
Con la interpretación de ‘La canción del legionario’ y el desfile a pie de los soldados en formación, liderados por la cabra, mascota ligada tradicionalmente a la Unidad, el acto concluyó entre los aplausos de amigos y familiares.
El jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEMET) finalizó su visita a la ciudad con el acto en el cuartel Millán Astray, tras pasar dos días en Melilla. Esta era la primera visita del responsable militar, desde su toma de posesión del cargo, en la que ha podido comprobar ‘in situ’ la situación de la guarnición melillense de la mano del comandante general, Álvaro de la Peña.
Según informó la Comandancia General de Melilla (Comgemel), Domínguez Buj visitó todas las unidades, campos de instrucción y simuladores con los que cuenta la Comgemel y realizó un recorrido por las parcelas y panteones del cementerio de la Purísima Concepción. Igualmente en la mañana de ayer se reunió con el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, en el despacho de Presidencia del Palacio de la Asamblea.
Premios del XCII aniversario fundacional
Durante esta semana, el Tercio de La Legión ha venido celebrando su 92º aniversario con diversas actividades y cometiciones deportivas, en las que se ha puesto de relieve el espíritu de unidad y compañerismo existente entre todos sus componentes. Por ello, el acto castrense de ayer también sirvió para entregar los premios que recayeron en el cabo 1º Haquin Hamed Amar (Premio Millán astray); el cabo 1º Samir Ahmed Al–Lal (Premio Teniente Coronel Valenzuela); el cabo Mustafa Mohand Ahmed (Premio Comandante Franco) y en el cabo 1º Emilio Durán Quesada (Premio Suceso Terrero).
Además, antes del inicio del acto castrense los legionarios melillenses disfrutaron en el Patio de Armas de un desayuno mientras la Banda de Guerra del Tercio interpretaba la Diana Floreada.