Ayer terminaron las IV Jornadas de Diabetes ‘Convivir con la diabetes’ que se celebraron en el Hospital Comarcal y los ponentes coincidieron en destacar la importancia de la prevención a la hora de combatir la enfermedad.
También hay que poner de relieve que desde las Administraciones Públicas se pueden poner en marcha medidas que ayuden a contrarrestar esta enfermedad. Desde diversos foros se ha lanzado la idea de subir los impuestos a los productos que ayudan a esta enfermedad, como las bebidas azucaradas o las grasas saturadas, y es imprescindible organizar campañas de concienciación y sensibilización. No es para menos que este problema preocupe, ya que la obesidad se ha catalogado como la epidemia del siglo XXI.
Muchos dirán que unos kilos de más no son malos y que es sinónimo de salud, pero la obesidad deriva en una enfermedad mucho peor que también se ha convertido en un verdadero quebradero de cabeza para la Organización Mundial de la Salud: la diabetes.
En Melilla la prevalencia de la diabetes es el doble que en el resto de España. Todas las acciones que se toman para contrarrestar esta enfermedad crónica se basan en la prevención, en la educación para adoptar buenos hábitos, esquivando así la obesidad.
Algunas diabetes son de tipo genético, pero otras son el resultado de una mala alimentación y de la vida sedentaria, ambas características demasiado presentes en nuestro día a día.
El cambio de hábitos, el estrés, la falta de ejercicio... todo suma para convertirse en parte de ese porcentaje por lo que hay que pensar en una vida saludable para no estar enfermo de por vida.