Los orígenes de la Dársena Pesquera se remontan a la época medieval, cuando Melilla era una próspera ciudad portuaria. La dársena servía como refugio para las embarcaciones y como punto de intercambio comercial con otras regiones del Mediterráneo. A lo largo de los siglos, la actividad pesquera fue ganando importancia, convirtiéndose en uno de los pilares de la economía local. La dársena era el lugar donde los pescadores descargaban sus capturas, reparaban sus barcos y se aprovisionaban de víveres.
En las últimas décadas, la Dársena Pesquera ha experimentado un declive en su actividad tradicional. La reducción de las flotas pesqueras y la competencia de otros puertos han contribuido a este cambio. Como consecuencia, la dársena ha perdido gran parte de su dinamismo y vitalidad.
A pesar de los desafíos actuales, la Dársena Pesquera de Melilla tiene un futuro prometedor. Las autoridades locales y la Autoridad Portuaria han puesto en marcha diversos proyectos para revitalizar la zona y convertirla en un espacio moderno y atractivo. Se pretende una remodelación, a través de una reforma que la convertirá en una amplia plaza pública en el mismo centro de la ciudad. Se prevé la creación de espacios para el ocio, la cultura y el comercio.
El cargadero
La historia de este cargadero se remonta a finales del siglo XIX, cuando la extracción y exportación de minerales era una actividad económica crucial en la región. En aquel entonces, el cargadero se utilizaba para cargar barcos con mineral extraído de las minas cercanas, que luego se enviaba a diferentes destinos para su procesamiento y comercialización.
Con el paso de los años, el cargadero del mineral de Melilla se convirtió en un símbolo de la industria minera en la zona, atrayendo la atención de visitantes y turistas interesados en conocer más sobre su funcionamiento y su importancia histórica.
A lo largo del siglo XX, el cargadero del mineral de Melilla experimentó cambios significativos debido a la evolución de la industria minera y a los avances tecnológicos en el transporte marítimo. A pesar de ello, este lugar ha logrado mantener su esencia y su relevancia como un punto de referencia histórico en la ciudad.
Hoy en día, el cargadero del mineral de Melilla sigue siendo un lugar de interés para aquellos que desean explorar la historia y la cultura de la región. Su arquitectura única y su ubicación privilegiada en la costa lo convierten en un destino imperdible para los amantes de la historia y la arqueología.
En resumen, la historia del cargadero del mineral de Melilla es un reflejo de la importancia de la industria minera en la región y de la evolución de la actividad económica a lo largo de los años. Este lugar emblemático sigue siendo un testimonio vivo de un pasado lleno de tradición y progreso en la costa de Melilla.
No seáis impocritas la flota pesquera se perdio por culpa de hassan II que apresaba y ametrallaban a los barcos pesqueros y los gobiernos españoles no hacían nada mi padre y abuelos eran pescadores del barrio de Corea y de barrio reina regente o barrio de los cuernos
Precisamente por sus connotaciones de espacio histórico y testimonio de una Melilla pesquera no muy alejada en el tiempo, reflejo de una Melilla solidaria, trabajadora y feliz y como homenaje y recordatorio presente de las gentes del mar y patrimonio cultural e inmaterial, junto a la indudable belleza de la misma y la lamina de agua frente a las murallas y ciudadela de Melilla La Vieja.
Si los proyectos de la AP pasan por hormigonar la Dársena para que 2 listos se monten el negocio a costa de los vinagres de findesemana mi oposición frontal al proyecto, pues ya está bien de rellenos del frente marítimo de Melilla.
¿No os da vergüenza en El Faro tanta propaganda, señora directora? ¿Podréis alguna vez informar de algún RESULTADO real de algo que haya solucionado o emprendido esta banda de farsantes llamada "gobierno de Imbroda"?
Se te escapa decir La banda de los Imbroda y Los Quevedo.