La programación de actividades navideña ha concluido en muy buena nota, así lo han expresado la consejera de Cultura, Fadela Mohatar, y Francisco Díaz, que han sido los encargados de organizar toda la Navidad para el disfrute de los melillenses, tanto grandes como pequeños.
Fadela Mohatar ha resaltado la oportunidad que ha tenido su área para poder dinamizar la ciudad y sobre todo el centro histórico durante la época navideña con todo tipo de actividades para las familias, adolescentes y niños. Una programación que terminó con una “prueba del algodón” que la Ciudad ha superado con creces.
La Cabalgata de los Reyes Magos es uno de los eventos más esperados en la ciudad y que esperan miles de familias con ilusión. Sin embargo, la climatología (previsión de lluvia y viento) amenazaba esta actividad tan especial. Pero esta “dificultad sobrevenida” consiguió resolverse de una manera “ágil y muy satisfactoria”, asegura la consejera de Cultura. “Todo lo que nos llegan son comentarios muy positivos”, añade.
En ese sentido, ha destacado la colaboración de Francisco Díaz, presidente de Melilla Monumental, quien ha agradecido la confianza puesta en su persona para sacar adelante la Cabalgata con éxito.
Después de varios días de estudio, se decidió solucionar este inconveniente con una propuesta diferente: una Cabalgata de Reyes Magos estática. Una propuesta que ha conseguido ganarse al público melillense y que resultó igualmente mágica e inolvidable que la Cabalgata tradicional. Ante la respuesta de la gente, Díaz no descarta que la idea pueda utilizarse en sucesivos años. “Habría que valorarlo y estudiarlo. Muchas veces no sabemos porqué pasan las cosas, pero un día que parecía que iba a ser muy malo, terminó convirtiéndose en un día muy bueno”, detalla.
Además de la acogida del público, la Cabalgata estática ayudó a dinamizar el centro; para los comerciantes también fue una muy buena tarde porque las calles estaban abarrotadas de gente. Esta es uno de los motivos, explica, por los que la opción también ha sido muy buena para todos los sectores y ámbitos. “Lo importante es que la gente ha disfrutado y se ha solventado en tiempo récord”, concluye.
Ni la décima parte del poder de convocatoria de años anteriores. Ni la calidad de las actuaciones. Un grave bajón de calidad y cantidad.
Los comerciantes no están muy de acuerdo que digamos.