Exige a la Ciudad que “deje de mirar a otro lado”, tras las demandas de Eulen y Trasmediterránea contra el acuerdo del reparto de las cuotas.
La Confederación de Empresarios de Melilla (CEME) expresó ayer su malestar por las tres demandas que han interpuesto contra el acuerdo del reparto de las bonificaciones a las cuotas de la Seguridad Social y que cuestionan la representatividad y legitimidad de la patronal melillense para firmar acuerdos. Ante el peligro de poder perder la bonificación estatal, la CEME toma la iniciativa y solicitará la modificación de la norma de la bonificación para que ésta sea exclusiva de las empresas que tengan su domicilio social en la ciudad o tengan establecido en las nóminas de sus trabajadores pluses vinculados a la residencia y a la bonificación, explicó la presidenta de la CEME, Margarita López Almendáriz.
El pasado mes de julio la CEME hizo frente a las demandas interpuestas por las patronales de seguridad privada (Aproseg) y de la limpieza de edificios y locales (Aspel) en contra del acuerdo del reparto de las cuotas. Detrás de ambas se encuentran, sostiene la CEME, la empresa Eulen. La pasada semana asistieron al juicio, que luego fue aplazado, por la demanda interpuesta, en esta ocasión, por Trasmediterránea.
Las dos primeras ‘batallas’ judiciales las ganaron en primera instancia en el Juzgado de lo Social, pero Eulen ha recurrido ambas.
Por tratarse precisamente de dos empresas que reciben dinero público, ya sea de la Administración local o estatal, la CEME exigió ayer al Gobierno local que “deje de mirar a otro lado” a la situación y reconsiderar la situación, especialmente, con Eulen, puesto que se adjudica numerosos contratos públicos.
El hecho de que esta empresa no reparta la bonificación con sus trabajadores pone en riesgo la misma bonificación en sí. Además de suponer una competencia desleal con las empresas locales que sí reparten. López Almendáriz destacó que, a pesar de las circunstancias, las pymes melillenses “saben competir y compiten a diario con estas empresas, siempre y cuando, no sean ellas las únicas invitadas o los contratos sean de tal dimensión o se requiera unos condicionantes tales que sólo pueden participar dichas empresas”.
“Siempre hemos sido respetuosos con las empresas de ámbito nacional que vienen a esta ciudad a prestar sus servicios, compitiendo en mejores condiciones, fundamentalmente por su tamaño y por el apoyo de las instituciones que se veían deslumbradas por el renombre de estas empresas”, agregó la presidenta de la patronal.
25 millones de euros anuales
La presidenta de la patronal aseguró que el riesgo de perder la bonificación a las cuotas de la Seguridad Social supondría perder 25 millones de euros anuales que se quedan en Melilla. Además, se pondría en riesgo la mitad del tejido empresarial de Melilla. Muchas pequeñas y medianas empresas se verían obligadas a despedir a trabajadores o incluso al cierre si se elimina la bonificación a las cuotas patronales.
Pero en esta ‘batalla’ también tienen las de perder los trabajadores que reciben entre 40 y 80 euros del plus de bonificación mensuales.