El tribunal considera que el caso no se ha investigado lo “suficiente”, pues no se ha identificado a los agentes implicados.
La Audiencia Provincial en Melilla ha aceptado el recurso contra el sobreseimiento y archivo provisional de la denuncia de cinco jóvenes de nacionalidad belga y origen marroquí y acepta su petición para que continúe la investigación de la presunta agresión policial que sufrieron en la frontera de Beni Enzar el verano de 2010. La Audiencia devuelve así el caso al Juzgado de Instrucción número 4, que ordenó el sobreseimiento provisional y archivo de la causa. Ordena en su resolución que se practiquen las pesquisas que el abogado de estos jóvenes vienen solicitando: La identificación de los agentes implicados en los hechos.
El tribunal considera que el caso “no ha sido suficientemente investigado” y subraya que es “necesario” que se identifiquen a todos los agentes del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) que intervinieron en los hechos para así esclarecer “definitivamente” lo ocurrido.
El auto de la Audiencia destaca que la “única diligencia de investigación” realizada ha sido el visionado de la grabación de las cámaras de la frontera de Beni Enzar. El juzgado de instrucción ordenó el sobreseimiento provisional y archivo de la denuncia “por no haber quedado acreditada la comisión del delito”. Según el auto de instrucción, recoge la Audiencia, “se observa que los denunciantes no obedecieron a una agente de Policía Nacional, se bajan del vehículo alterados y luego circulan a gran velocidad en sentido contrario para salir de nuevo a Marruecos, obligando a los que querían acceder a apartarse”.
Las reveladoras imágenes
Lo apreciado por la juez instructora en esas grabaciones no coincide con el parecer de la Audiencia, como así consta en el auto. El tribunal, tras visionar las grabaciones de las cámaras de seguridad de Beni Enzar, afirma que “desde luego no llega a la misma conclusión que la instructora”. Ciertamente, las escenas que la juez “relata en su auto de sobreseimiento” pueden visionarse en los vídeos, pero “no se hace alusión alguna a dos secuencias sumamente relevantes”.
“Se ve a una policía nacional acercarse al coche en que viajaban los denunciantes para identificarlos. Lo primero que hace es arrancar un objeto hasta dos veces, tirándole una vez al suelo y luego al interior del coche (descapotable). Es evidente –dice el tribunal en el auto– que ese objeto no puede ser otro que la bandera marroquí a la que aluden los denunciantes. Esta acción –de la agente policial– no parece en principio razonable y es posible que hubiera podido influir en los acontecimientos posteriores”.
La segunda secuencia destacada por la Audiencia se refiere al intento de huida de los jóvenes de vuelta a Marruecos, cuando supuestamente fueron agredidos. “Es cierto que la maniobra constituye claramente una acción antirreglamentaria e indebida”, destaca el tribunal y puntualiza: “Sin embargo, no es menos cierto que antes de lograr huir, se observa nítidamente en la grabación cómo un número indeterminado de agentes de la Policía Nacional se abalanzan contra el coche, lo rodean y sin solución de continuidad todos ellos, valiéndose de sus defensas reglamentarias (las conocidas como porras), golpean repetidamente a los denunciantes indiscriminadamente y de forma reiterada”.
La Audiencia devuelve el expediente del caso al Juzgado de Instrucción número 4 para que se atienda las peticiones de los jóvenes denunciantes y que han sido rechazadas “en varias ocasiones”. La solicitud de estos jóvenes no es otra que la identificación de los agentes implicados en los hechos para que presten declaración judicial y luego la instructora podrá adoptar “con plena libertad” sobre la resolución que se ajuste a derecho.
Altercados en la frontera por portar banderas
El verano de 2010 estuvo protagonizado por diversos altercados en la frontera de Beni Enzar a causa de que tanto melillenses como marroquíes portaban en sus vehículos banderas de sus respectivos países y querían cruzar el paso fronterizo. Estos incidentes provocaron cierta polémica y el intercambio de información entre los Ministerios de Asuntos Exteriores de España y Marruecos. Aparentemente el incidente con los cinco jóvenes y la Policía Nacional fue aclarado vía diplomática, pero los jóvenes presentaron la denuncia.
El 17 de julio de 2010, El Faro se hizo eco del incidente producido entre la Policía Nacional española y cinco jóvenes belgas, de origen marroquí, en la frontera de Beni Enzar a causa de que éstos portaban una bandera del Reino alauita. Marruecos denunció el “maltrato policial” que su súbditos recibieron.