Inmobiliarias de Melilla consultadas por El Faro consideran que los altos precios de los locales comerciales de la Avenida Juan Carlos I Rey suponen el principal obstáculo para que se puedan alquilar. Sin embargo, además del encarecimiento de los precios, estos espacios tampoco se alquilan porque "los propietarios sobrevaloran el precio del inmueble".
"Casi todos los locales comerciales que se alquilan en el centro, y en Melilla en general, están sobrevalorados", indican desde la Gestoría Gama. De esta forma, explican que quienes deciden abrir un negocio tienen que tener en cuenta los gastos extra de sobrevaloración del precio del inmueble, además de la serie de gastos que tienen que hacer como los impuestos, tasas y permisos.
El pretexto de los propietarios no es otra cosa que el hecho de que son los dueños del inmueble y que son quienes marcan el precio del alquiler "sin ver cómo está el mercado ni hacer caso a los profesionales" cuando les advierten de esas circunstancias. En este sentido, "se dejan asesorar hasta cierto punto" y ponen los precios que creen convenientes, sobrevalorando y tratando de sacar "de donde no hay" en los tiempos que corren.
"No está la gente como para negocios nuevos en este sentido", señalan desde esta inmobiliaria. Además, explican que las empresas no llega "con tanta presión y tanto gasto", por eso, si los alquileres estuviesen un poco más baratos en la Avenida podrían estar todos los locales alquilados.
Desde Melilla Urbana suscriben también que los precios de los alquileres están altos y que desde hace ya muchos años se viene incrementando el precio. Aunque afirman que la irrupción de la pandemia y el cierre de la frontera han hecho que baje un poco el precio de los alquileres.
Cabe recordar que el pasado mes de octubre bajaron también los alquileres de los locales del centro, y desde la Asociación de Comerciantes de Melilla dijeron que no hay negocios para ocupar esos espacios.
Desde las inmobiliarias de Melilla como Gestoría Gama o Melilla Urbana defienden que es difícil establecer un precio medio de los alquileres de los locales comerciales de la ciudad. Según explican, son muchas las variables que hacen que sea un precio u otro, ya que es diferente cuando el inmueble se encuentra en una calle principal o en una transversal; o cuando tiene unos metros cuadrados determinados.
Por ello, varían tanto que se hace complicado que se pueda establecer una estimación concreta de precio medio del alquiler. Aunque si se pregunta por algunos o se echa un vistazo, los precios oscilan entre los 600 o 1.000 euros hasta los 3.000 e incluso 8.000 euros en la Avenida Juan Carlos I Rey.
Si uno se da un paseo por la calle principal del centro de la ciudad y va contando los locales que están cerrados desde hace un tiempo, puede llegar a contar hasta 13 comercios con las persianas bajadas.
Aumento por la inflación
Este incremento de los precios va acorde a la inflación que en este mes de noviembre se sitúa en un 5,6%, es un nuevo máximo histórico desde 1992. "Tenemos una inflación por las nubes, ha subido el IPC, y la inflación alcanza el mayor pico de los últimos 30 años, todo eso influye, pero es la presión guberbnamental, y la burocracia que tenemos lo que también hace que suba", señalan desde la Gestoría Gama.
Se desprende del avance del índice de precios al consumo (IPC) publicado este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que datos apuntan a que este repunte se produjo pese a la bajada de los precios de la electricidad en comparación con octubre. La subida de los precios de la alimentación y, en menor medida, la de los carburantes y lubricantes para vehículos personales están detrás de esta evolución al alza, ya que en noviembre de 2020 ambas categorías descendían.
El avance difundido por el INE también señala que la inflación subyacente -que no incluye el precio de los alimentos ni de la energía- se situó en el 1,7 % este mes, tres décimas más que en octubre y casi cuatro puntos por debajo del IPC general.
Como siempre la falsedad y la codicia juegan conjunta en los negocios. Tanto inmobiliarias, como dueños de locales fantasmeando y creyendose que son poseedores de una pocion magica. Y mientra que haya ingenuos que paguen esos abusivos precios en locales por creerse de la alta bueguesia de comerciante, pues viva la Pepa. Señores, Melilla vuelve a los 70, donde las familias miran por un euro, donde lo de segunda mano y lo de mercadillo se busca apresuradamente y donde las marcas son para unos cunantos ilusos que se creen tocados por la mano divina, y viven en las nubes. Melilla requiere una economia acorde con el poder adquisitivo de la sociedad, y quienes quieran vender plomo a precio de oro que se marchen con sus locales a New York que alli esta Tramp, y de seguro los desvalijara en un abrir y cerrar de ojos. Eso si lo hara con el pretesto de que ello es un asunto de Seguridad Nacional.
o con el pretexto de la libertad, libertad para metertela... aunque luego te sea imposible recuperar el dinero pero el palo esta metido...
Inmobiliarias,mira la cara dura que tienen va una persona a vender una casa por 100 , le dicen vale 200 .