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Robles reconoce que hay problemas estructurales en el ambulatorio y promete su reforma
El director territorial del Ingesa, Francisco Robles, aseguró ayer que se va a incrementar la seguridad a primera hora en el centro de salud de Cabrerizas, tras las cuatro agresiones que se produjeron ayer en el ambulatorio. Se prevé aumentar el número de vigilantes cuando hay más altercados, que es a la hora de abrir el centro, debido a las colas que todos los días se realizan en las puertas para coger una cita con su médico.
Otra de las medidas del Ingesa es cambiar las citas de los pacientes en este ambulatorio. Robles indicó que los sanitarios han propuesto que se reserven más horas para poder ofrecerlas a primera hora de la mañana.
Más huecos
El coordinador del centro de salud, José Manuel Alférez Fernández, indicó ayer que el 20% de los pacientes que piden una cita por Internet no acude a la consulta. Además, un 32% de los enfermos que solicita hora con su doctor para dentro de varios días tampoco va al centro de salud. Por ello, estiman que un 52% de los pacientes no ve al médico a pesar de tener hora concertada, lo que deja fuera a muchos enfermos que sí necesitan esta entrevista con su doctor.
Por ello, Robles apuntó que se abrirán más huecos en las agendas de los médicos de cabecera y pediatras para las peticiones de primera hora de la mañana.
Asimismo, el director territorial del Ingesa reconoció que hay deficiencias estructurales en este ambulatorio. Aseveró que el compromiso es reformarlo y ampliarlo.
En cuanto a las agresiones, Robles destacó que los sanitarios están “normalizando” las faltas de respeto y las agresiones y no pueden tolerarlas. Animó a todos los empleados del Ingesa a denunciar ante la más mínima situación de violencia. En respuesta a la queja de los sindicatos publicada el jueves, añadió que “no sale barato” realizar estas agresiones.
El director territorial señaló que hay “cuatro elementos y no la globalidad de la población que hay en la zona” que tiene este tipo de actitudes contra los sanitarios.
Además, comentó que el perfil de los usuarios de este centro de salud requiere de unas medidas adecuadas y que “sin duda hay un problema de educación”. En este sentido, aseveró que se trata de un problema de falta de respeto por parte de un colectivo a sanitarios, profesores y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Concentración contra las agresiones en zona centro
La concentración en el centro de salud de Cabrerizas no fue la única que se produjo ayer. El personal de los ambulatorios de General Polavieja y de la zona centro se reunieron también la puerta de esta institución para mostrar su repulsa por los insultos y las faltas de respecto de las que son víctimas sus compañeros.
Todos se solidarizaron con los tres médicos y la enfermera que fueron agredidos el pasado miércoles.