Tercera victoria consecutiva de la fase por la permanencia para un Melilla Sport Capital al que le bastó tener acierto exterior en el inicio de partido para impedir que el Real Murcia Baloncesto pudiese romper el partido antes del descanso y una solidez defensiva tras el descanso, con el liderazgo de Wintering en los minutos finales.
El partido comenzó marcado por la puntería desde el perímetro de ambos conjuntos, que encontraban en el triple su única vía de producción fiable. Con un ritmo alto y a campo abierto en la mayoría de sus ataques, con poco ataque posicional, el equipo que abrió la veda fue el Murcia de la mano de un ex de Melilla, Rubio, que lideró un parcial de 15-2, con tres triples para comenzar a marcar diferencia por encima de los diez puntos (20-8).
Todo ello porque el cuadro visitante tenía un problema en el balance defensivo y en la defensa posicional, unido a la falta de claridad en ataque, con mala selección de tiro y mucho desacierto, salvo en acciones esporádicas de Wintering o Kamba. En los minutos finales del cuarto salió a pista Mbaye, que desde media distancia empezó a producir en el apartado ofensivo para su equipo. Un triple de Norris sobre la bocina, dejó una diferencia de 13 puntos al final del período (25-12).
Todo cambió en el segundo acto. Desde la máxima diferencia de 15 puntos (27-12) al inicio, el equipo preparado por Alejandro Alcoba sufrió una metamorfosis en ataque y mejoró su actitud defensiva y logró paliar sus deficiencias en el rebote defensivo. Uclés, Dedovic, Sikiras y Misters sacaron a relucir su mejor versión anotadora desde el perímetro y voltearon el marcador con un parcial demoledor de 11-28 y renovaron las sensaciones sobre el parqué para el conjunto melillense. Solo la tercera falta de Toncinic y la falta de puntos interiores, con solo cinco canastas en los dos primeros períodos, tres de ellos de la mano de Mbaye, parecían factores a corregir. Esta situación, en cambio, encontró su contrapeso en el 9 de 15 en triples que permitía llegar al descanso al Melilla Sport Capital con ventaja en el marcador (38-40).
Tras el descanso volvió a torcerse el encuentro. El acierto en el triple de ambos conjuntos desapareció, salvo en Norris para el equipo entrenado por Rafa Monclova. Juan Rubio no volvió a anotar ni un solo punto y Melilla Sport Capital controló el partido desde la defensa, la superioridad en el rebote defensivo y la mejoría en el ofensivo, con la dirección de Wintering, que impuso claramente el ritmo de juego que le convenía a su equipo. A ello se le sumó la aportación clave de Mbaye en la zona, a pesar de que se cargó con cuatro faltas y sus minutos en pista disminuyeron.
Norris puso en jaque, con una racha anotadora en el tercer cuarto, al Melilla a 1:50 para el final con una renta de 8 puntos (56-48), pero la defensa visitante en las líneas de pase, que alternó con una presión a toda pista por momentos, y el liderazgo de Wintering rescataron al conjunto entrenado por Alejandro Alcoba para llevar el choque a un cara o cruz a los dos últimos minutos, a los que se llegó se llegó con una mínima ventaja para la escuadra del Real Murcia (65-62).
En ese momento aparecieron y tomaron protagonismo los dos jugadores clave para el Melilla Sport Capital, Wintering y Mbaye. El pívot anotó dos canastas seguidas en la zona y Wintering una bandeja de mucho mérito que voltearon el partido y lo sentenciaron, aunque el Real Murcia Baloncesto pudo forzar la prórroga con dos triples de Jaron Martin que no entraron.