El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, ha expresado su firme rechazo a la reforma de las bonificaciones a la Seguridad Social que está impulsando el Gobierno de España. Durante su intervención, Imbroda arremetió contra el Ejecutivo central, calificándolo de "antinatura" y acusándolo de tomar decisiones que afectan gravemente la economía local y el bienestar de los melillenses. La modificación de las bonificaciones ha sido un tema candente en el Congreso, y, en palabras de Imbroda, "es una aberración que castiga a los más vulnerables".
Imbroda mostró su descontento con las decisiones tomadas por el Gobierno y expresó que la reforma de las bonificaciones no responde a una necesidad real de mejora económica. "Es el gobierno que estamos padeciendo. Como máximo le quedan dos años, pero ya está, ni un día más", afirmó el presidente de Melilla, quien no dudó en calificar este gobierno como "antinatura", compuesto por "los restos de los adversarios de España y con algunos de la extrema izquierda". Imbroda señaló que el actual Ejecutivo está tomando decisiones políticas ideológicas que, en su opinión, solo perjudican al tejido empresarial de la ciudad y a la clase trabajadora.
La bonificación a la Seguridad Social y su impacto en las pequeñas empresas
Imbroda recordó que la bonificación del 50% a la Seguridad Social fue alcanzada en 2002 bajo el gobierno del presidente José María Aznar, y que, a lo largo de los años, esta medida se fue extendiendo hasta incluir a diferentes sectores, siendo finalmente incorporada a la Ley de Seguridad Social para garantizar su estabilidad. La bonificación fue una herramienta clave para aliviar la carga económica sobre las pequeñas y medianas empresas, especialmente en Melilla, donde el pequeño empresario es un pilar fundamental de la economía local.
Sin embargo, el presidente de Melilla subrayó que la reforma de la bonificación que ha planteado el Gobierno de Pedro Sánchez no tiene en cuenta las características del empresariado local. "¿Qué piensa un señor del Gobierno cuando ve esta bonificación? Cree que es para favorecer al empresario, y en su mente está el dueño de Apple o de Red Bull. Pero se equivoca. Aquí estamos hablando de pequeñas tiendas, talleres, estaciones de servicio. Son negocios que dependen de esta ayuda para poder mantener los empleos", explicó. Según Imbroda, el Gobierno ha tomado una postura equivocada, pensando en las grandes corporaciones y no en los pequeños empresarios que constituyen la base de la economía de la ciudad.
Imbroda también destacó que el 40% de la bonificación beneficiaba directamente a los trabajadores, que veían un incremento en su salario gracias a esta medida. "Eso lo conseguimos nosotros, más que conseguirlo, lo impusimos. No podía ser que el 100% fuera para el empresario. Llegamos a un acuerdo para que el 40% beneficiara directamente a los empleados. Y ahora han eliminado esta parte", denunció Imbroda, mostrando su frustración por la eliminación de este beneficio para los trabajadores.
Castigo a los trabajadores temporales y a los más vulnerables
El presidente de Melilla también criticó la reforma que excluye a los trabajadores temporales de la bonificación. Según Imbroda, esta medida es especialmente perjudicial para aquellos que ya enfrentan una situación de inestabilidad laboral. "Un trabajador temporal ya tiene un problema de estabilidad, y ahora, además, le quitan ese 40% que recibía de la bonificación. Es un castigo doble", afirmó.
Imbroda subrayó que la reforma castiga a los sectores más vulnerables de la sociedad. "Han ido contra la parte más vulnerable y más débil socialmente hablando de toda esta ecuación. Los trabajadores temporales son los que más necesitan el apoyo de estas bonificaciones, pero se les está excluyendo", lamentó. A su juicio, esta medida refleja una ideología equivocada, orientada a castigar a los que ya se encuentran en una posición más débil.
El PSOE y la falta de coraje político
El presidente melillense también acusó al PSOE de falta de coraje y dignidad al no apoyar las propuestas que se plantearon en el Congreso para revertir esta reforma. "El PSOE no quería quitarla, pero ha tragado. Y los palmeros de Melilla aplauden cualquier cosa que hagan en Madrid, sea mala, buena o regular", criticó Imbroda, refiriéndose a la actitud pasiva de algunos sectores de la política local que apoyan las decisiones del Gobierno central sin cuestionarlas.
Según Imbroda, la falta de apoyo del PSOE a las propuestas de su partido refleja una falta de voluntad para defender los intereses de los trabajadores y las pequeñas empresas de Melilla. "No tuvieron el coraje ni la dignidad de apoyar lo que estábamos planteando. Me parece muy mal lo que han hecho. Muy mal", sentenció.
Consecuencias para la economía de Melilla
El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla advirtió que la reforma de la bonificación tendrá consecuencias negativas para la economía local. "Las empresas ya están en una situación difícil, y esto solo las asfixia más. Si a eso le sumamos el golpe que supone para los trabajadores, estamos ante una decisión nefasta", aseguró Imbroda.
Para el líder melillense, la eliminación de la bonificación afecta a los sectores más dinámicos de la economía local, especialmente aquellos que generan empleo directo e indirecto para muchas familias. "No vamos a quedarnos de brazos cruzados. Seguiremos dando la batalla para que se haga justicia con esta ciudad y con su gente", concluyó Imbroda, quien reiteró su compromiso de seguir luchando contra estas políticas que, en su opinión, solo profundizan la desigualdad y la inestabilidad económica en la ciudad.
En resumen, Juan José Imbroda mostró su total rechazo a la reforma de la bonificación a la Seguridad Social impulsada por el Gobierno central, calificando la medida como una "aberración" ideológica que no solo afecta a las pequeñas empresas sino también a los trabajadores más vulnerables de Melilla.