Hay una serie de prioridades para hacer los test rápidos y eso lo dejó muy claro este jueves el consejero de Políticas Sociales, Mohamed Mohamed Mohand, que subrayó que a los menores en situación de calle no se les va a realizar la prueba rápida del COVID-19 ni aunque la Consejería de Distritos, que lleva la gestión de estos centros, adquiera esos test, asunto que iba a llevar al Consejo de Gobierno. Mohand explicó que hay una guía en la que se han definido las prioridades y se publicará una nueva conforme vayan contando con más test para ir pasando a diferentes colectivos y los menores que entran y salen de los centros no son una prioridad, añadió.
En estes sentido reconoció que hay “peligro” por riesgo de contagio de estos chicos, pero subrayó que la medida que se tiene que aplicar con ellos es el confinamiento en los centros de acogida e insistir en este tema.
La primera guía para hacer test rápidos que llegó con estas pruebas era del Ministerio de Sanidad y solo se podían hacer a pacientes que llegaran con síntomas a Urgencias. Unos días más tarde, la Consejería de Políticas Sociales hacía una guía propia, tras obtener el permiso de Sanidad nacional. En ella marcaba que los test era para personal sanitario y sociosanitario de Ingesa, Residencia de Mayores, Centro Asistencial y Gámez Morón.
Afirmó que ningún residente de estas tres últimas instituciones ni sus empleados han dado positivo y felicitó a todos ellos por el buen trabajo realizado para evitar el contagio del virus.
También se ha practicado ya esta prueba a 1.500 personas que trabajan para Ingesa y no solo sanitarios y los resultados son “fructíferos”, añadió Mohand.
Ahora toca hacer una nueva guía para ampliar a otros colectivos y los siguientes serán las clínicas privadas, farmacéuticos y profesionales sanitarios, como dentistas o fisioterapeutas. Asimismo, se harán los test rápidos a las profesionales de ayuda a domicilio.
Mohand indicó que esperan más pruebas de este tipo para la semana que viene y una vez que los tengan, seguirán ampliando a más colectivos de profesionales. El orden serán las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Policía Local, Protección Civil y Bomberos. Y en otra siguiente oleada de test se hará a personal de supermercado, al personal de Correos y a la plantilla de la empresa de limpieza y recogida de basura.
También comentó el consejero de Políticas Sociales que se ha escogido a 900 personas de Melilla para hacer un estudio de prevalencia del virus y han sido escogidas por el Instituto Nacional de Estadística. Se les harán dos tipos de pruebas y será Atención Primaria la encargada de llevar este tema. Se harán las pruebas durante dos semanas para ver si hay personas que han superado ya el virus o si tienen COVID-19.
El objetivo es conocer la incidencia y se harán 2.700 test que llegarán el sábado o el domingo.
Ya son 1.500 las solicitudes que se han registrado en los Servicios Sociales de familias demandando ayuda en estos momentos de crisis sanitaria, pero también económica al cerrarse muchos negocios y actividades en Melilla. El consejero de Políticas Sociales, Mohamed Mohamed Mohand, explicó que se están haciendo los cribados necesarios en los Servicios Sociales para que las familias que precisan de la ayuda la reciban lo antes posible de acuerdo con el reparto de alimentos y otros productos de primera necesidad que hacen ONG con el Banco de Alimentos o Cruz Roja. Mohamed Mohand indicó que quien ya recibe una ayuda económica se tiene en cuenta para dar prioridad a otras familias.
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