La asociación Guelaya-Ecologistas en Acción han denunciado que los vertidos ilegales de residuos han registrado un repunte en los últimos meses. Desde la asociación también han calificado de "dejadez" la actitud que ha desarrollado, en lo relativo a esta situación, la Administración local.
En declaraciones a este medio, el presidente de Guelaya, Manuel Tapia, afirmó que en Melilla existe un problema de incivismo, pues mucha gente decide arrojar residuos en puntos concretos de la ciudad. Sin embargo, lamenta que desde el Gobierno de la Ciudad Autónoma no se hace nada, dejando una sensación de impunidad.
Tapia enumeró los distintos puntos negros de vertidos de residuos en nuestra ciudad, como son la pista de carros, el Toro de Osborne o el barranco de Cabrerizas.
El presidente de Guelaya definió a Melilla como "la ciudad de las leyes que no se cumplen".
Tapia recordó la existencia de un Real Decreto que obliga a los comercios de electrodomésticos a recoger los aparatos viejos, alegando que esto no funciona en Melilla y apuntando la posible autoría de estos vertidos a comercios y cadenas de electrodomésticos, pues el tamaño de algunos vertidos indicaba que se habían llevado a cabo con un vehículo de grandes dimensiones.
Por tanto, abogó por hacer un seguimiento, a través del número de serie de los aparatos, para intentar averiguar el establecimiento del que proceden.
En definitiva, el presidente de Guelaya habló del hastío que muchas personas sienten, debido a la sensación de que no se puede hacer nada por el medio ambiente en Melilla. No obstante, habló de la presencia reciente de un equipo de biólogos de la Sociedad de Estudios Biológicos Iberoafricanos, que acudió a estudiar el patrimonio natural de nuestra ciudad.
"La verdad es que tenemos un patrimonio natural envidiable, que causa admiración en el resto de España, pero que aquí no valoramos en absoluto".
Guelaya siempre realiza su temporada de plantaciones en los meses frescos. La primera fue el pasado mes de diciembre y este sábado continuará con la reforestación del río de Oro.
Con esta plantación solidaria, la asociación tiene por objetivo ayudar al medio ambiente de Melilla y recaudar dinero para causas solidarias. En este caso, destinado a la ONG Médicos del mundo.
"Creemos que las navidades también son momentos de recordar lo que están haciendo esas organizaciones, porque parece que hemos olvidado el espíritu navideño y nos centramos demasiado en el consumismo".
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