Graziella Moraes es médico estético. Miembro de la Sociedad Española y Gallega de Medicina Estética, ha conversado con El Faro sobre la campaña del Ministerio de Igualdad "Soy real, soy auténtica"; sobre los retoques estéticos más demandados por hombres y mujeres y sobre la belleza y sus límites.
¿Por qué cree que la Sociedad de Clínicas de Medicina Estética expuso su disconformidad con la nueva campaña “Soy real, soy auténtica” del Ministerio de Igualdad?
En mi opinión, y sin ningún sesgo político, creo que la idea de la campaña es buena, pero la forma en la que se ha hecho no es del todo acertada porque deja fuera a otras mujeres que sí que se hacen tratamientos o retoques y que son igual de reales y auténticas que aquellas que deciden no hacerlos.
Entiendo que la Sociedad de Clínicas de Medicina Estética (SEME) esté disconforme con la campaña porque los médicos estéticos llevamos años queriendo normalizar el uso de tratamientos como parte de la rutina de cuidados y belleza de las personas y al no incluir a esta parte de la población en la campaña, sin mala intención, se da a entender que quién recurre a dichos tratamientos es menos “real o auténtico” que quién no los utiliza.
La campaña aboga por mujeres “auténticas”, que se muestren como son sin estereotipos. ¿Piensa que la campaña ha querido decir que quien se hace tratamientos estéticos no es “auténtico”?
No creo que la campaña haya sido creada con esa intención ni que se haya querido mandar el mensaje de que quién se hace tratamientos estéticos no es auténtico. Sin embargo, al no incluir a estas personas en la campaña creo que de alguna manera se las excluye y puede generar incomodidades.
¿Por qué cree que tantas personas se someten hoy día a la medicina estética?
Porque cada día se normaliza más el uso de la de medicina estética para vernos mejor. Hoy en día hay mucha más información y opciones, diferentes maneras de entender y realizar los tratamientos con resultados muy naturales.
Ahora mismo hay una respuesta para cada paciente, para aquellos que quieren prevenir, para los que buscan mejorar algún aspecto con resultados naturales y para aquellos que buscan cambios más exagerados. Al final, lo que todos queremos es sentirnos bien con nosotros mismos y la medicina estética es otra herramienta para ayudarnos a conseguirlo.
¿Cuáles son los tratamientos estéticos más recurrentes en mujeres? ¿Y en los hombres?
En las mujeres diría que la toxina botulínica es uno de los tratamientos clásicos más demandados, es muy eficaz dando vivacidad y abriendo la mirada. También el reposicionamiento de volúmenes faciales y ahora, cada vez más, la flacidez y el cuidado de la piel.
Lucir una piel sana, tersa y bonita se está convirtiendo en la prioridad entre las mujeres.
Los hombres, al igual que las mujeres, también se preocupan de las arrugas del tercio superior y del cuidado general de la piel y cada vez más demandan tratamientos para realzar el contorno del ángulo mandibular con líneas más definidas.
¿Qué opina de las mujeres que se someten continuamente a retoques estéticos?
En la medicina estética, al igual que todo tratamiento de belleza, necesita un mantenimiento, y eso no quiere decir que estemos abusando de un tratamiento, sino que tienen un tiempo de efectividad y hay que volver a hacerlo para seguir notando sus efectos.
Por ejemplo, la toxina botulínica tiene una duración de entre 3 y 5 meses y los ácidos hialurónicos tienen una efectividad de entre 10 y 12 meses. Una vez pasado este tiempo, si queremos seguir notando los efectos debemos volver a hacernos el tratamiento.
Sin embargo, si nos referimos a personas que se hacen continuamente retoques estéticos distintos, sin control, y que buscan cambiar su aspecto de manera exagerada, en mi opinión, eso no es un buen uso de la medicina estética.
Creo que es responsabilidad de los médicos estéticos aconsejar a nuestros pacientes estudiando la morfología y las necesidades de cada persona, recomendando tratamientos que realcen o mejoren sin cambios exagerados, yendo de menos a más y sabiendo siempre cuándo parar. Ningún exceso es bueno, tampoco en la medicina estética.
¿Qué es para usted la belleza?
Después de varios años viendo a pacientes distintos, creo que la belleza es muy subjetiva. Existen tantos tipos de bellezas como personas y creo que mi trabajo es sacar el potencial que tiene cada una ayudando a que se vean mejor consigo mismas.
Trato a cada paciente de manera individual, no hay un canon de belleza al que parecerse, cada paciente es único e intento potenciar los mejores rasgos de cada uno para obtener el mejor resultado realzando su belleza personal de manera natural.