El Gobierno ha evitado, este lunes, responder a preguntas sobre la negativa de Marruecos a negociar con quien no reconozca la "marroquinidad" del Sáhara y se ha limitado a subrayar que España considera a Marruecos “vecino y amigo” y que “trabaja con diligencia” las relaciones diplomáticas.
Así ha respondido la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros al ser preguntada por la afirmación del rey Mohamed VI de que la marroquinidad del Sáhara Occidental es innegociable y que Marruecos “no dará ningún paso económico o comercial que excluya al Sáhara”.
Preguntada por la cuestión, la ministra portavoz se ha limitado a responder que Marruecos “es un país, vecino, amigo y que es estratégico para España”.
Y por ello, “trabajamos con diligencia las relaciones diplomáticas, porque es positivo para la defensa de los intereses nacionales”, ha zanjado Rodríguez.
El pasado 6 de noviembre, el rey Mohamed VI advirtió de que “para Marruecos, el Sáhara no puede ser objeto de negociación. Además, la marroquinidad del Sáhara jamás se planteó ni se planteará nunca sobre la mesa de las negociaciones".
Por ello, en su discurso del 46 aniversario de la Marcha Verde, el monarca advirtió de que su país no firmará con ningún país o bloque regional acuerdos que no engloben al territorio del Sáhara Occidental.
"Marruecos no dará con ellos ningún paso económico o comercial que excluya al Sahara", precisó Mohamed VI sobre los países o bloques que mantienen "posturas difusas o ambivalentes" sobre ese territorio.
Sus palabras se producen después de que el pasado 29 de septiembre el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) anulara los acuerdos de asociación y de pesca entre la UE y Marruecos al dar la razón al Polisario, que los había impugnado por explotar recursos del Sáhara.
El rey Mohamed VI advirtió, este sábado, en un discurso que la marroquinidad del Sáhara Occidental es innegociable, pero ignoró la actual escalada de tensión entre su país y Argelia, agravada después de que Argel acusase a Rabat de matar a tres de sus ciudadanos en un supuesto bombardeo en el territorio saharauí.
“Para Marruecos, el Sáhara no puede ser objeto de negociación. Además, la marroquidad del Sáhara jamás se planteó ni se planteará nunca sobre la mesa de las negociaciones”, precisó el monarca en su discurso con motivo del 46 aniversario de la Marcha Verde, la iniciativa tras la cual el país se anexionó el Sáhara Occidental.
El gobierno español, como siempre, cobarde y falto de una postura contundente. El sahara occidental, es patrimonio del pueblo saharagui, usurpado a España por el descaro de Hassan II y la complicidad de los franceses y norte americanos. Seamos por una vez valientes y llevemos este caso hasta el final, y si hay que romper relaciones con Marruecos se rompen que en la balanza de cooperacion, España siempre sale con el rabo entre las patas. Tengamos honor y dignidad, cosa que dudo tengan nuestros politicos