“Las cuchillas hieren”. Eso fue lo que pensó el fotógrafo Luis Gaspar hace unos meses al ver en televisión un reportaje sobre la instalación de la concertina en la valla fronteriza de Melilla.
Gaspar quedó impactado con el anuncio y decidió hacer unas fotografías sobre el tema. El artista no tenía ninguna intención concreta, simplemente consiguió comprar una concertina y quedó con amiga para tomar unas instantáneas en su estudio. La primera vez que tocó el alambre quedó impactado y lo mismo les ocurrió a muchos de los que pasaron por el estudio los días siguientes. Poco a poco aquella idea que había surgido en el sofá una tarde de sábado fue tomando forma. Más de un centenar de imágenes, en las que rostros conocidos y anónimos posan con la concertina. La muestra puede verse desde el jueves en el Ateneo de Madrid. Luis Gaspar tiene claro cuál es su objetivo: Concienciar sobre los efectos negativos que tiene esta medida antiintrusión.
El fotógrafo afirmó ayer en declaraciones a El Faro que él no pretende con esta muestra hacer un análisis sobre el fenómeno migratorio. “Yo no soy un experto en el tema, para analizar esta cuestión hay personas más adecuadas. Lo que tengo claro es que la concertina es una herramienta perversa y que no debe estar ahí”, apuntó.
Entre las personas que han participado en este proyecto, que lleva por título 'Vallados', está la periodista Susana Griso, el presentador Maxim Huertas, el director de cine Fernando León de Aranoa o las actrices Juana Acosta y Ana Labordeta. Gaspar aseguró ayer que para todos los protagonistas de las imágenes fue impactante encontrarse con la concertina. “La reacción de la mayoría fue el silencio. Te das cuenta de que está tan bien hecha, que sólo con rozar se engancha a la piel o a la ropa. Entonces piensas en la gente que salta esa valla y se encuentra con ella”, dijo el fotógrafo.