El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha asegurado que el suministro a España de gas argelino está "totalmente garantizado", si bien ha admitido que el Gobierno sigue con "preocupación" la crisis entre Argelia y Marruecos y por ello hará lo posible para evitar una escalada entre ambos "socios estratégicos".
En declaraciones en el Congreso, el titular de Exteriores ha hecho hincapié, por un lado, en que "está fuera de toda duda" que el gas de Argelia seguirá llegando tras el cierre del oleoducto que atravesaba Marruecos, hasta el punto de afirmar: "No hay ninguna posibilidad de que el suministro de gas argelino no llegue a España porque está totalmente garantizado por los propios suministradores".
Y por otra parte se ha referido a la crisis entre los dos países del Magreb agravada por la muerte de tres civiles que Argelia atribuye a un ataque procedente de un dron marroquí en el Sahara Occidental.
"Seguimos con preocupación cualquier cosa que pueda afectar a dos países que son fundamentales para la estabilidad del Mediterráneo", ha reconocido Albares, quien ha enfatizado que España "siempre estará del lado de la desescalada, de evitar escaladas y de construir un partenariado que es esencial para que todo el mundo pueda vivir".
En este sentido, ha considerado al próxima cumbre de la Unión por el Mediterráneo que se celebrará el próximo 29 de noviembre en Barcelona "una gran oportunidad" para situar el Mediterráneo y su "prosperidad" y "desarrollo" en "partenariado de ambas orillas de ese mar".
El Gobierno, en todo caso, sigue "muy de cerca" la situación, ha comentado igualmente, y está recabando toda la información posible pensando en contribuir a que el conflicto no vaya a más.
"Vamos a trabajar en todo lo que esté en nuestras manos para que no se produzca una escalada entre dos socios estratégicos como son Marruecos y Argelia", ha concluido el ministro de Exteriores.
En cuanto a la posibilidad de que vuelva a Madrid la embajadora de Marruecos, que fue llamada a consultas en mayo por su país a raíz de la crisis con España por la acogida hospitalaria del líder del Frente Polisario, Brahim Gali, se ha limitado a recordar que es algo que depende de Marruecos porque constituye "una decisión soberana de cada país".
Es más lo que los une que lo que los separa. El problema erradica en la situación del Sahara Occidental y empeorado desde que el Fleki a un día de largarse creyó adjudicarles su soberania. Me dá que éste asunto de ésta no pasa. Deseo que no se traduzca en otra guerra de arenas y por su proximidad nos acabe enfangando a tods.
A mí con Marruecos no me une NADA en absoluto. Espero que Argelia le dé un buen golpe al NarcoRégimen mafioso de Rabat y la ponga en su sitio de una vez. Toda mi simpatía por Argelia y el Sáhara Occidental