El VIII Ciclo de Teatro del Hospital del Rey cierra este fin de semana con éxito rotundo y una alta participación. Así lo ha celebrado la consejera de Cultura, Fadela Mohatar, quien se ha enorgullecido del apoyo ciudadano que recibe la programación cultural de la ciudad. El broche de oro de esta edición lo pone la obra ‘El último baile de Miss U’, de Ángel Caballero, esta noche con su última función.
En ese sentido, Fadela Mohatar ha destacado la calidad de las muestras teatrales que las distintas compañías han desarrollado durante todo el verano, así como el “éxito rotundo” de participación con el que se ha saldado esta edición. Para el próximo año, la Consejería de Cultura seguirá apostando por este ciclo de teatro y por el mismo género.
Asimismo, Mohatar ha informado de que la Ciudad Autónoma tiene previsto llevar a cabo una rehabilitación del patio del Hospital del Rey. El proyecto ya se habría iniciado junto a la Consejería de Fomento para realizar una “pequeña obra de reparación” de todo el patio.
Los desperfectos de las instalaciones del Hospital del Rey se encuentran en sintonía con la situación en la que el Gobierno se ha encontrado algunas instalaciones culturales, como el Auditorio Carvajal. La titular de Cultura ha dejado claro que, a causa de esto, el espacio no ha podido tener la “celeridad” deseada, pero con esta reparación espera que se puedan desarrollar otras actividades previstas en el Hospital del Rey.
‘El último baile de Miss U’ se representa esta noche y mañana. La obra, escrita y dirigida por Ángel Caballero (que también actúa en ella), está inspirada en la vida de la actriz Amparo Muñoz, que fue Miss Universo 1974 y vivió una terrible época de abusos en su vida tras ganar el título.
Además de Caballero, el elenco lo componen las actrices Kensit Perris y Esther Arroyo, que ha debutado en el teatro nada más y nada menos que en Melilla. Arroyo, que interpreta el papel protagonista, se ha mostrado muy ilusionada de tener la oportunidad de subirse a las tablas por primera vez en su vida y agradece a Ángel Caballero por el “regalazo” que supone una obra como esta.