El Sindicato Independiente de Melilla, (SIM) lamenta que la Coordinación de Seguridad Privada de la Ciudad Autónoma de Melilla (CAM) no haya repuesto el monitor para visualizar las cámaras de seguridad del centro de menores de La Purísima tres meses y medio después de los altercados ocurridos en el recinto.
En una nota de prensa denuncia además que siguen sin arreglarse la puerta metálica de primera acogida, que se encuentra en un estado lamentable y con serio peligro de que cualquier día se produzca un accidente con resultados graves, ya que es de grandes dimensiones y de hierro; o las barreras de control de acceso de vehículos siguen sin funcionar.
Asimismo, denuncia que la mayoría de las cámaras de vigilancia y la iluminación del centro de ocio y deportes del Fuerte de Rostrogordo siguen sin repararse casi dos años después de que se denunciara su situación.
Según el SIM, muchos de los servicios no cuentan ni con walkie talkie, ni con teléfonos corporativos y además los vehículos no contaminantes exigidos en el pliego de condiciones no cumplen la normativa vigente, porque son de uso doméstico y de difícil manejo.
En este sentido, añaden que se entregaron unos patinetes y no se impartió curso alguno para el manejo de los mismos.
El Sindicato Independiente lamenta asimismo que las instalaciones tienen que ser limpiadas por los mismos vigilantes al no contar con servicio de limpieza, y casetas denunciadas y sancionadas por la Inspección de Trabajo, como la del Parque Lobera, siguen sin reponerse.
Exigencia de chalecos sin sentido
Para el Sindicato Independiente de Melilla, lo más lamentable es que desde la Coordinación de Seguridad Privada, encargada de la fiscalización del cumplimiento del contrato, se esté preocupando de imponer un chaleco reflectante a los vigilantes que realizan servicios en zonas abiertas, cuando esa prenda no forma parte de la uniformidad, sino que es un Equipo de Protección Individual (EPI) que solo debe usarse en caso de que peligre la seguridad del vigilante o de las personas del recinto, es decir, en caso de afluencia masiva de personas, cosa que no ocurre en ninguno de los casos.
Por todo ello, el SIM solicita que se ponga fin a lo que consideran “una pantomima de la Coordinación de Seguridad Privada de la CAM para justificar su trabajo”, y cuya importancia “no atiende a las urgencias que merece el sector en las dependencias municipales” en el que – aseguran– hay muchas deficiencias de instalaciones.