El Puerto de Melilla cumple sus objetivos con unas cuentas “intachables”

El pasado año aumentó del tráfico de pasajeros mientras que el de mercancías se mantuvo en niveles de 2009, datos más que positivos para el presidente del ente, Arturo Esteban.

El balance de 2010 no ha podido ser más positivo para la Autoridad Portuaria de Melilla teniendo en cuenta que Puertos del Estado ha dado un espaldarazo al ente melillense tanto en el ámbito de la gestión como en la claridad de las cuentas. Estos fueron los aspectos más destacados por su presidente, Arturo Esteban, quien reseñó el incremento del 7,1 por ciento en el tráfico de pasajeros así como “hemos mantenido el tipo” en el tráfico de mercancías, manteniendo las cifras conseguidas en 2009 con un movimiento de 829.000 toneladas el año pasado.
La satisfacción por un trabajo bien hecho es la sensación generalizada en el Puerto de Melilla al haber conseguido cumplir más del 90 por ciento de los objetivos marcados por el ente el pasado año 2009. Un cumplimiento que ha sido corroborado tras la auditoría realizada por Puertos del Estado para la Intervención General del Estado (IGAE), a la que anualmente se someten los entes portuarios. El grado de cumplimiento de los objetivos que fueron fijados  por la Autoridad Portuaria de Melilla, conjuntamente con Puertos del Estado, para el año 2009 se sitúa en el 99 por ciento para los objetivos de primer nivel y en un 93 y 95 por ciento para los de segundo y tercer nivel, respectivamente.

Auditoría de Puertos del Estado

Además, el Puerto de Melilla fue una de las once instituciones portuarias del país que presentó unas cuentas “intachables” durante el ejercicio del 2008, según el informe de la IGAE presentado en septiembre del año pasado. Así, la Autoridad Portuaria recibió una valoración positiva del Estado sobre sus aspectos contables, retribuciones salariales, adjudicaciones, entre otros apartados en los que Melilla aprobó el examen de los auditores estatales.
Por otra parte, Esteban recordó que, tras su entrada en la Autoridad Portuaria de Melilla, se pretendió crear un espacio de ocio en la Marina Seca del puerto deportivo. Un proyecto que se vio cancelado ante la tardanza del Ministerio de Fomento para aprobar el Plan de Utilización de los Espacios Portuarios (PUEP). Seis años después este plan ha sido aprobado por Fomento el pasado mes de agosto y supone una herramienta que permite a la Autoridad Portuaria delimitar las zonas de servicio terrestre y marítimas, y la asignación de los usos previstos para las diferentes zonas del enclave con su correspondiente justificación de necesidad o conveniencia.
Otro de los aspectos destacados del 2010 para el ente portuario fue la constitución del nuevo Consejo de Administración en el mes de diciembre reduciendo a la mitad el número de vocales en virtud de la nueva Ley de Puertos.
Dentro del apartado de proyectos y obras, Esteban destacó la puesta en marcha del Muelle Ribera II que permite la llegada de buques de gran calado, propiciando un notable incremento en el tráfico de cruceros, con el consiguiente espaldarazo a la economía melillense. De igual modo, su apertura sirvió para incrementar la operatividad de la Estación Marítima.

Medio Ambiente

Además, el año 2010 se caracterizó por el alto compromiso de la Autoridad Portuaria con la seguridad y el medio ambiente revalidando el Sistema de Gestión de la Calidad conforme a la norma ISO 9001:2008, otorgada por la entidad internacional DNV, y que comprende todos los procesos incluidos en su alcance ‘Gestión de Contenedores’. Un reconocimiento que la Autoridad Portuaria de Melilla ha obtenido de manera ininterrumpida desde el año 2007.
También ha sido el noveno año consecutivo que el Puerto de Melilla ha conseguido el distintivo de Bandera Azul gracias al cumplimiento de una escrupulosa política de respeto al medio ambiente en el puerto deportivo. Un reconocimiento concedido por la Fundación Europea de Educación Ambiental que, a través de análisis oficiales del agua, reconoce el cumplimiento de las normas de calidad.
Por otro lado, Esteban también destacó la barrera de contención como añadido a los recursos en prevención de riesgos medioambientales para dar una respuesta rápida y eficaz a posibles derrames de hidrocarburos en aguas de la zona de servicio del puerto y que ha sido utilizada en dos ocasiones.
Por último, una de las medidas de la que el presidente de la Autoridad Portuaria dijo sentirse más satisfecho fue la instalación de tres desfibriladores en la Estación Marítima, en el Puerto Deportivo y en los talleres con el fin de poder prestar atención inmedata a los usuarios y trabajadores en caso de sufrir un ataque cardíaco. Se trata, hay que recordar, de una medida voluntaria recogida en el Decreto aprobado el pasado 12 de junio por el Consejo de Gobierno de la Ciudad.

Presencia internacional

Uno de los eventos portuarios más importantes vividos por el ente melillense fue el pasado mes de noviembre acogiendo la Asamblea de la asociación RETE cuyo objetivo es intensificar las relaciones puerto–ciudad. Momento en el que Autoridad Portuaria de Melilla recibió el reconicimiento de los socios al proyecto de ampliación del puerto y obras como el paseo del espaldón del puerto, por ser un ejemplo de sostenibilidad.
Además, el director de la Autoridad Portuaria, José Luis Almazán, ha participado en foros europeos como el TOC Europe ofreciendo una ponencia sobre la Optimización de la explotación de terminales de contenedores en el sistema portuario español y en el Port Finance International donde disertó sobre la creación de valor en las terminales portuarias.
Por último, Esteban reseñó el proceso de modernización de la administración del ente portuario melillense con la puesta en marcha de la e-factura o el Servicio de Atención al Cliente a través de la página web, en una apuesta por los medios telemáticos y un incremento de la calidad en las relaciones entre el puerto y sus usuarios, garantizando una mayor comodidad y seguridad a la hora de realizar cualquier trámite.