El Club Melilla Baloncesto en Silla de Ruedas (BSR) cerró su participación en la Segunda División Nacional con un balance de una sola victoria en toda la temporada, lograda en la última jornada del campeonato ante el Covirán Churriana, este pasado domingo. A pesar de un año complicado, el equipo dirigido por Chico Ruso logró terminar la competición con un triunfo, un resultado que supone un pequeño impulso anímico tras meses de esfuerzo sin recompensa.
El equipo melillense ha competido en el Grupo B de la Segunda División Nacional, la tercera categoría del baloncesto en silla de ruedas en España, bajo la organización de la Federación Española de Deportes de Personas con Discapacidad Física (FEDDF). A lo largo de la temporada, el conjunto azulón ha tenido que hacer frente a un calendario exigente, enfrentándose a rivales de gran nivel como Cludemi Almería, Fundación Luctari Burgos y Club Deporte Adaptado Bahía de Cádiz. Desde el inicio de la temporada, el Club Melilla Baloncesto en Silla de Ruedas se encontró con dificultades para sumar victorias. Durante la primera vuelta, el equipo encadenó una serie de derrotas que lo colocaron en la parte baja de la tabla. A pesar de los intentos por revertir la situación, los melillenses no lograron imponerse a sus rivales hasta la última jornada, cuando lograron su primera y única victoria ante Covirán Churriana.
El partido de despedida de la temporada fue un reflejo del trabajo y la perseverancia del equipo. En un encuentro muy disputado, el Club Melilla BSR logró finalmente romper la mala racha, imponiéndose a su rival con un juego sólido y efectivo. Esta victoria no solo sirve para cerrar la temporada con un mejor sabor de boca, sino que también refuerza la moral del equipo de cara al futuro.
Deporte adaptado
A pesar de los resultados deportivos, el Club Melilla Baloncesto en Silla de Ruedas sigue siendo un pilar fundamental en la promoción del deporte adaptado en la ciudad. La creación de esta sección en agosto de 2022, en colaboración con la Consejería de Deportes, fue un paso clave para impulsar la inclusión y ofrecer una plataforma competitiva a los deportistas con discapacidad de Melilla.
Desde entonces, el equipo ha disputado sus encuentros como local en el Pabellón Javier Imbroda, enfrentándose a equipos de gran nivel y representando a la ciudad en una competición nacional. Si bien la temporada no ha sido fácil en términos de resultados, el club ha seguido trabajando con el objetivo de consolidarse en la categoría y mejorar su rendimiento en futuras ediciones. Con la temporada ya finalizada, el Club Melilla Baloncesto en Silla de Ruedas comenzará a planificar el futuro con el propósito de fortalecer el equipo y mejorar su desempeño en la próxima edición de la Segunda División Nacional.
El principal desafío será seguir desarrollando su proyecto deportivo, atraer nuevos jugadores y consolidar una base que permita al equipo ser más competitivo en el futuro. El esfuerzo, la constancia y la pasión por el baloncesto en silla de ruedas han sido claves para que el club siga adelante a pesar de las dificultades. El triunfo ante Covirán Churriana es un recordatorio de que el trabajo duro da frutos, y sin duda, servirá como motivación para el equipo de cara a los próximos retos. A pesar de haber cerrado el curso con solo una victoria, el Club Melilla Baloncesto en Silla de Ruedas ha demostrado que la lucha y el compromiso con el deporte adaptado continúan siendo su mayor fortaleza.