El Consejo de Ministros, en su reunión de este martes y a propuesta del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, ha autorizado licitar por 78,65 millones de euros (IVA no incluido) un nuevo contrato de navegación para garantizar la conexión marítima de la ciudad de Melilla con la Península mediante las líneas de interés público Málaga-Melilla, Almería-Melilla y Motril-Melilla, con unas frecuencias, calidad y precio óptimos. El Ministerio ha mejorado las condiciones del contrato para dar más seguridad y continuidad al servicio casi duplicando la dotación presupuestaria bienal y su duración.
Así, con el objetivo de garantizar la conexión y financiar el déficit de explotación que supone, se ha aprobado un presupuesto de 39,3 millones de euros para los próximos dos años, entre el 1 de abril de 2024 y el 31 de marzo de 2026, frente a los 22,3 millones de euros (sin IVA) del contrato actual para un total de 24 meses, prórroga incluida.
Los pliegos establecen como novedad la prórroga por otros dos años (por la misma cantidad de 39,3 millones de euros), lo que da un total de 76,8 millones de euros para cuatro años.
Condiciones del contrato
La licitación establece, entre otras condiciones, unas frecuencias mínimas de seis rotaciones semanales entre Málaga-Melilla y tres rotaciones semanales entre Motril-Melilla y Almería-Melilla, que se ampliarán en el período veraniego, Semana Santa y Navidad y cuando se estime que puede producirse una gran demanda o medien causas de utilidad pública.
Para desarrollar estas conexiones marítimas, la adjudicataria dispondrá de una dotación mínima de dos buques con menos de 5 años de antigüedad con 450 plazas para pasajeros y 250 para vehículos y servicio de autoservicio-cafetería.
La licitación ratifica el compromiso del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible con la movilidad segura y continuada de los ciudadanos y con la integración territorial de nuestros territorios. Además, garantiza una adecuada conectividad de Melilla mediante el transporte marítimo.
El actual contrato se encuentra en una prórroga de un año por cuanto que su vigencia concluyó el pasado mes de marzo. Aunque en principio se habló de seis meses, al final el período se ha ampliado hasta marzo próximo.
El contrato marítimo actual entró en vigor el 1 de abril de 2022 por un importe global de 11,1 millones de euros. El contrato cuenta con dos lotes, uno que incluye las rutas con Almería y Motril (7,1 millones de euros) y otro referente a la conexión con Málaga (4 millones de euros). Además, se estipula que el número mínimo de rotaciones debe ser de tres en el primer lote y de seis en el segundo.
El pliego de condiciones marca unos precios de entre 45 y 180 euros para los camarotes y de entre 50 y 60 euros para las butacas. También se indica que habrá descuentos para los menores de 12 años (50%) y para los mayores de 60 (20%). Las personas poseedoras de un carné joven también tendrán una rebaja del 20 por ciento en el precio de los billetes. Viajar con el coche tendrá un coste de 60 euros.
En marzo de 2023, la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, ya adelantó que idea era seguir trabajando desde el Gobierno, a través del Ministerio de Transporte, sobre los dos ejes que considera fundamentales. Por un lado, “continuar con la mejora de las condiciones” en que se presta el servicio y por el otro, aumentar la calidad. En definitiva, se trata de dotar a Melilla del mejor de los contratos marítimos posible, tal y como detalla al respecto el Plan Estratégico Integral del Gobierno para Melilla, tal y como señaló la delegada.
Adjudicataria
Ese contrato de 2022 fue adjudicado a Balèaria, como mejor oferta en el lote 1 y la única que se presentó en el lote 2. Además, la empresa presentó ofertas en ambos lotes en los que se comprometió a que habrá hasta 4 camarotes para su uso con mascotas; además de contar con el servicio de cuidado y actividades de animación para niños de hasta 12 años; internet gratuito con wifi para los viajeros durante la duración del viaje; un área de silencio independiente en acomodación turista y preferente, así como la apertura del autoservicio-cafetería en horario nocturno durante la duración del viaje.
Además, a primeros de abril pasado, Balèaria incorporó a la línea con Málaga su buque "Rusadir", completamente nuevo y con unas prestaciones por encima de las expectativas del propio contrato marítimo.
El ‘Rusadir’ es un buque de nueva construcción y última generación, de propulsión eléctrica y capacidad para 1.670 pasajeros. Está dotado de 261 camarotes, que darán alojamiento a 800 personas, además de cafeterías, restaurantes, cine y sala de rezo, entre otras instalaciones. Realizará siete rotaciones semanales y con sus 22 nudos de velocidad realizará la travesía en 6 horas, siempre que las condiciones climatológicas sean óptimas en el mar.
Duras crítcas
La oposición y, fundamentalmente, el Partido Popular, ha sido siempre muy crítico con aquel contrato marítimo de 2022 por cuanto entienden que supone una involución con respecto a las mejoras que se habían venido introduciendo durante el tiempo de Gobierno del PP. De hecho, la situación del transporte marítimo, muy criticada por los melillenses, fue objeto de una inteprelación que lo populares presentaron hace un año al equipo CpM-PSOE, al que se pedía que interviniera en Madrid para exigir mejores cánones de calidad en el servicio.
El PP siempre sostuvo que el contrato de 2022 era "el peor de la historia" e incluso solicitó su retirada. Según dijo entonces el secretario regional del partgido, Miguel Marín, que se redujeron de 21 a 12 las rotaciones, que permanecerán igual en el contrato de 2024: seis a Málaga, tres a Almería y otras tres a Motril, lo cual permite anticipar que los populares se posicionarán en contra.
De hecho, en una reciente entrevista con El Faro, el presidente de la Autoridad Portuaria, Manuel Ángel Quevedo, aseguró que se trabajaba entre su organismo, el Gobierno local y el PP en una serie de propuestas encaminadas a mejorar el pliego de condiciones de la licitación del contrato marítimo. En ese sentido, apuntaba a la promoción del turismo y la necesidad de disponer de un servicio más acorde con las expectativas turísticas de la Ciudad Autónoma.