Dominio La escuadra melillense llevó la iniciativa durante casi todo el partido pero no obtuvo el premio al trabajo realizado Efectividad Los malagueños consiguieron los goles en las dos ocasiones que crearon. El Casino no pudo dar continuidad a la racha positiva en la que estaba inmerso ante otro equipo enrachado como el filial malaguista, que hizo lo justo para llevarse una victoria que no hace justicia a lo presenciado en la tarde noche de ayer en el campo federativo de La Espiguera. La escuadra melillense no mereció perder en un duelo en el que llevó siempre la iniciativa frente a un rival que se mostró muy ordenado y disciplinado sobre el terreno de juego pero, que defraudó en su propuesta futbolística, impropia de un filial que debe tener como patrón la filosofía del primer equipo en cuanto a juego de toque y elaboración.
Los albiazules, ayer de negro, se llevaron del feudo melillense un excesivo premio que consolida a los de Pep Clotet en la segunda posición de la clasificación a tan sólo un punto del Atlético Mancha Real, líder del Grupo con un partido menos. Por su parte, el conjunto que dirige Fernando Aznar, sigue ocupando puestos de play-off aunque con el Martos y el Linares al acecho.
El partido en sí no tuvo mucha historia. El Casino fue dueño y señor de la pelota aunque le faltó profundidad frente a un rival que se bastó con un par de zarpazos para llevarse los tres puntos en juego. Los de Fernando Aznar salieron muy enchufados y al poco del inicio Golu lo intentó a la media vuelta, pero sin consecuencias. Tres minutos después, en el diez, Sufian hizo lo propio, tras pase de Amin ,pero Pol atajó sin problemas. Amín, muy activo toda la tarde, probó fortuna tras una internada por la banda derecha pero su disparo salió muy cerca del palo derecho del portal visitante.
En el 22, cuando nadie lo esperaba y en la primera aproximación al área local de los visitantes, Óscar habilitó con un pase interior a Mauri que se plantó solo ante Verdejo al que batió de tiro cruzado, adelantando a su equipo en el marcador. El Casino siguió intentándolo pero sus ofensivas se estrellaban una y otra vez ante el ordenado tramado defensivo malagueño, por lo que al descanso se llegó con ventaja visitante.
Tras la reanudación, más de lo mismo. Los melillenses seguían controlando el juego pero sin generar verdadero peligro hasta que pasada la hora de partido, Amín asistió a Moha, pero el disparo del centrocampista realista lo despejó un defensor a córner. La insistencia del Casino tuvo su recompensa poco después, cuando Sufian se hizo con una pelota en el área y cayó derribado. El colegiado Artacho Cobo no dudó un instante en señalar el punto fatídico y Sidi, con paradiña incluida batió a Pol de disparo ajustado al palo derecho a pesar de que el meta malaguista llegó a tocar el cuero. La igualada hacía justicia y el partido quedaba totalmente abierto con la sensación de que la victoria podía caer del lado casinista.
A falta de diez minutos para la conclusión Farid I se hizo con poderío de un balón, pisó área ,pero erró en el pase, cuando tenía a dos compañeros en inmejorable situación para conseguir adelantar a su equipo. Pero el fútbol, una vez más, demostró lo cruel que puede ser y del posible 2-1 se pasó al 1-2 como consecuencia de un rápido contragolpe llevado por Rufo en la banda izquierda que llegó casi hasta la línea de fondo y centró al área donde apareció Pirulo para cabecear al fondo de la portería defendida por Verdejo. Era el segundo acercamiento al área local y los visitantes volvían a demostrar una efectividad.
El gol sentó como un jarro de agua fría a los de Aznar pero los melillenses siguieron buscando la igualada con ahínco y a punto estuvieron de conseguirla por mediación de Sidi al rematar con la testa un saque de esquina que un defensor sacó bajo los palos y de Sufian que enganchó una volea sin consecuencias de cara al marcador.