Mucho tendrán que cambiar las cosas para la escuadra melillense del River, que milita en el grupo IX de la Tercera División, para que no sea el candidato principal a ser el primero de los descendidos de la presente temporada liguera.
La escuadra de nuestra ciudad, a pesar de que ninguno de sus jugadores está bajando los brazos, no está teniendo nada de suerte en los partidos que lleva disputados, el último de ellos este pasado fin de semana donde cayó por el resultado de 2-3 frente al Polideportivo Almería, en el campo federativo de La Espiguera.
Tras este nuevo traspiés, el conjunto dirigido por Marso Mohamed se encuentra hundido en la última posición de la clasificación general de este grupo nacional, con menos dos puntos. La nota más preocupante es que la zona tranquila de la tabla clasificatoria ya se encuentra a 19 puntos de diferencias.
El River Melilla tiene que comenzar a sumar puntos lo antes posibles puesto que en las quince jornadas disputadas tan solo sumó un empate, pero una sanción federativa por su incomparecencia en el terreno de juego del Linares Deportivo hizo que le descontaran tres puntos en la clasificación. Con este bagaje poco es el futuro que tiene este equipo en categoría nacional, si bien es cierto que cada uno de sus jugadores, se están dejando la piel en cada uno de los partidos que se llevan disputados, a pesar de que todos los resultados son negativos.
En cuanto al próximo fin de semana, el conjunto melillense se tendrá que desplazar en la mañana del domingo a tierras granadinas, concretamente a la localidad de Motril, donde se medirá al titular de la misma, para intentar sumar un resultado positivo.
Este encuentro se disputará a las 12:30 horas en el campo municipal Antonio Escribano. El cuerpo técnico melillense espera recuperar a alguno de los jugadores que se encuentran atravesando pequeñas dolencias físicas que les impiden estar al cien por cien.