El proyecto ‘Melilla, conocer para entender’ busca mejorar el conocimiento y la imagen de la ciudad en redes sociales a través de cinco vídeos ya disponibles en el siguiente enlace:
Estos videos ya se pueden visualizar en los perfiles de redes sociales de Tu guía en Melilla y Melilla Turismo.
De la mano de Jennifer Aragón, y con el actor y cómico Edu Soto como locutor, se abordan distintos aspectos de Melilla como los recintos fortificados, el modernismo o la multiculturalidad. Los impulsores de esta campaña destacan que hay muy pocas imágenes de Melilla en redes sociales.
Titulados ‘Melilla: conocer para entender’, el primer vídeo recorre Melilla La Vieja empezando desde la Plaza de las Culturas. Tras atravesar el Foso de Hornabeque, se recuerda que Rusadir fue fundada por los fenicios en el siglo VII a.C. y habitada por fenicios, cartagineses, romanos o árabes. En su paseo, Aragón y Soto llegan al Baluarte de las Cinco Palabras, donde, según explica Aragón, estaba la horca y los reos, antes de ser ejecutados, tenían que entonar un rezo compuesto por cinco palabras, que eran “Creo en dios padre todopoderoso”. La grabación muestra la Ensenada de los Galápagos, donde desembarcaron, el 17 de septiembre de 1497, las tropas de Pedro de Estopiñán para tomar Melilla, momento desde el cual la ciudad ha pertenecido a España. En este vídeo, Soto muestra su sorpresa ante las maravillas de Melilla, ante lo cual la guía le responde que la historia de Melilla “es muy poco conocida”.
El segundo vídeo cruza la Puerta de Santiago para adentrarse en el primer recinto fortificado, que es, según Aragón, “el corazón de la ciudad”. En el siglo XVI, se construyó la capilla de Santiago, único ejemplo de arquitectura gótica en toda África y en cuyo lateral hay una pequeña puerta que conduce a la ciudad subterránea. En la grabación, la guía cuenta que, para poder beber agua, los españoles construyeron los aljibes, “la mayor obra hidráulica de España en ese momento”. “El paseo del tercer al primer recinto es espectacular, con museos, callejuelas, la antigua Casa del Gobernador”, cuenta Soto antes de llegar a la Plaza de Estopiñán para después entrar en las Cuevas del Conventico, donde la población se refugió durante un asedio en el siglo XVIII durante 100 días. Para Edu Soto, toda la zona es “un sitio mágico donde se mezclan la mano del hombre y de la naturaleza junto con el aroma del mar”. “Es de esos momentos que recuerdas para siempre”, añade.
El tercer vídeo se adentra en la Melilla modernista y comienza en la casa de Mohamed, donde Soto y Aragón toman un té con pastas y dátiles antes de encarar el “triángulo de oro, que alberga el mayor número de edificios modernistas de la ciudad”. Llegan ambos así al edificio La reconquista, en la plaza Menéndez Pelayo y obra del arquitecto catalán Enrique Nieto. “Por eso se parece a los edificios de Barcelona”, dice el actor, quien se para junto a la estatua de Don Quijote y Cervantes a preguntarles, en broma, por el paradero del arquitecto. Ya en serio, Soto cuenta que, aunque Nieto colaboró con Gaudí, su influencia viene del creador del Palacio de la Música de Barcelona, Lluís Doménech. Finalmente se encuentra con la estatua de Enrique Nieto en la Avenida y le reconoce, en una conversación repleta de humor, que la ciudad le quedó “bonita, bonita, bonita”.
A partir de ahí, entra el cuarto vídeo, que se refiere a la interculturalidad de Melilla. “Melilla es tan distinta a cualquier ciudad” que hace a la gente “pensar diferente e incluso verse diferente”. “Me parece que Melilla es una ciudad muy interesante y una de las cosas que más me sorprende y apasiona es la convivencia en armonía de cinco culturas tan diferentes”, responde a la pregunta de Aragón sobre qué le parece la ciudad, antes de nombrarlas: cristiana, judía, musulmana, gitana e hindú. A Soto le parece “fascinante que haya esta convivencia tan bonita en un mundo que está siempre hostil”. Así, explica el actor, “Melilla es uno de los pocos lugares donde podemos encontrar un Portal de Belén, luces del Pesaj, velas del Diwali o procesiones pasando por sinagogas o mezquitas mientras se rompe el ayuno del Ramadán”. Una vez en el Rastro, llegan a la Mezquita Central, que le recuerda al actor a las Mil y una noches. Un bazar donde se compra una chilaba o un espejo le parece “una cueva en la que, de repente, estás en otra parte del mundo”, lo cual le resulta de “una gran riqueza”. “La marca de la ciudad: su identidad intercultural”, le replica la guía. Gracias a este recorrido, Soto se dio cuenta de que “a los melillenses las diferencias los enriquecen y el respeto los une”.
Finalmente, el quinto vídeo, le sirve al actor para “procesar” todo lo aprendido desde una panorámica de Melilla desde las alturas. Para ello, acude a los fuertes de las Victorias, construidos en el siglo XVIII en honor a la patrona de la ciudad. Después de referirse a las conexiones subterráneas de Melilla, Soto explica en el vídeo que el Fuerte de la Victoria Grande “fue testigo de luchas entre españoles y rifeños” y, con la guerra civil, se convirtió en la primera cárcel franquista de mujeres. Desde allí a lo alto, Soto aprovecha para reflexionar y acaba lanzando un mensaje donde dice que se marcha de Melilla “con muy buen sabor de boca” y repasa sus conocimientos: la Melilla que se esconde entre muros, la Melilla modernista, la Melilla que acepta todas las culturas que aquí conviven o el mejor cus cus que ha comido en su vida.
“Me voy de Melilla muy consciente de que es una gran desconocida, así que os invito a que conozcáis de cerca esta ciudad tan apasionante. Está llena de sorpresas. No os vais a arrepentir. Me despido de Melilla deseando volver”, concluye su mensaje el actor.
Según afirma Aragón, los vídeos fueron rodados a finales de octubre “con mucho cariño y un trabajazo detrás”, aunque reconoce que lo pasaron “muy bien”. En este sentido, cuenta que el actor “es muy flexible”, y que los vídeos, aunque ya estaban preparados, se adaptaron a su personalidad para que quedaran lo mejor posible. “Se quedó alucinado con la ciudad, porque, conforme íbamos rodando, le hacíamos las visitas guiadas”, cuenta sobre Soto.
Preguntada sobre lo que más le gustó al actor, asegura que Melilla La Vieja le “encantó”, especialmente la parte que va del tercer al primer recinto, que le “fascinó”. Además, Soto salió encantado con el modernismo, del que “no tenía ni idea, ni aun siendo catalán”, cuenta Aragón.
“Se sabe muy poco de Melilla”, lamenta la guía, quien espera, con estas fuentes, “llevarla un poquito más lejos”. En este sentido, su deseo es que estos documentos “lleguen al mayor número de personas posible” mediante “un relato fresco y novedoso” para YouTube, donde “apenas hay nada, pocos vídeos de Melilla”, para que la gente que quiera venir de visita tenga otras fuentes para culturar además de su página web.
Además, Aragón hace hincapié en que “este tipo de proyectos son bienes que se quedan permanentes”, porque permiten que “cualquier persona, desde cualquier lugar del mundo, puede tener información de Melilla antes de venir o, si se lo está pensando, que le hagan dar el último paso antes de venir a conocer la ciudad”.
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