El acuartelamiento Millán Astray acogió su solemne sábado legionario, en el que también fue condecorado el ex número dos de la Jefatura de Policía, Miguel Vaquero.
El que fuera hasta hace unos meses el comandante general de Melilla, Álvaro de la Peña, regresó ayer a la ciudad para participar en el sábado legionario celebrado en el acuartelamiento Millán Astray del Tercio de La Legión melillense. El general fue nombrado legionario de honor durante el acto castrense en el que también fue condecorado el que fuera número dos de la Jefatura Superior de Policía en Melilla. Miguel Vaquero recibió la Cruz al Mérito Militar con distintivo blanco.
El tiempo acompañó durante la mañana de ayer a los numerosos mandos militares y autoridades civiles que asistieron al acto presidido por el comandante general de Melilla, Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu. Entre las autoridades asistentes se encontraba el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda y el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani.
Entre el público también se encontraba el escritor y periodista Arturo Pérez Reverte, quien dijo estar en la ciudad visitando a unos amigos.
De la Peña recibió este nombramiento por las muestras de “sensibilidad especial a las tradiciones legionarias, respetándolas y fomentándolas, contribuyendo con su actitud a hacer más grande a La Legión”, durante su estancia en la ciudad al frente de la Comgemel.
Posteriormente, fue el encargado de colocar la ofrenda floral a los pies del Cristo de la Buena Muerte durante el tradicional homenaje a los caídos por la Patria. Durante el acto castrense también se impusieron diversas condecoraciones a damas y caballeros legionarios.
El sábado legionario fue escenario de la celebración del tercer encuentro de veteranos de La Legión. Algunos de sus miembros participaron en la parada militar que puso el broche de oro al acto castrense.