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El jugador del Decano cumplió en la pasada jornada liguera su partido 100 vistiendo la elástica del Melilla Baloncesto
Con motivo de los 100 partidos oficiales como azulino, el capitán del Club Melilla Baloncesto, Pablo Almazán, ha concedido una entrevista a la web oficial de la entidad en la que hace repaso a ese centenar de partidos, pero además habla de su vida personal y de la importancia que ha tenido en su vida la llegada a Melilla hace tres temporada.
-Eres el noveno jugador que cumple 100 partidos defendiendo la camiseta del club, ¿qué se siente?
- Es un orgullo poder cumplirlos en un club como el Melilla Baloncesto, el Decano de la competición y que todos los años siempre aspira a lo máximo y no es fácil mantenerse. Esto era algo que no me podía imaginar cuando llegué aquí, porque en el baloncesto todo cambia mucho cada temporada. Ahora, echando la vista atrás, me siento muy orgulloso de alcanzar esta cifra y sobretodo agradecido al club por la confianza que ha mostrado siempre en mi.
-¿Cuál ha sido el mejor momento de esos 100 partidos?
-Sin duda el ascenso, pero no solo por el último partido sino por todos los Playoffs que vivimos y que fueron mágicos. Ver colas para acceder al pabellón, la ilusión durante esas semanas, aunque si me tuviese que quedar con algún partido sería el último en Huesca, que supuso la consecución de un sueño.
-¿Algún partido que recuerdes especialmente?
-No soy un jugador que recuerda muchos partidos, si que es verdad que al final de temporada analizas cosas y te retroalimentas de lo que has hecho bien y mal, pero personalmente no hay ningún partido que, por estadísticas, me sienta especialmente orgulloso. No me considero ese tipo de jugador.
-¿El peor momento?
-El peor momento fue el año pasado. Fue una temporada difícil. El momento en el que tuve la lesión, por el momento que fue y no poder ayudar al equipo en los Playoffs fue muy duro, tanto a nivel personal como de equipo.
-¿Qué supuso no poder conquistar la Copa Princesa?
-Es una espina clavada. Es un partido que no se olvida y a la vez me siento orgulloso de lo que hicimos. Fue un gran esfuerzo y terminamos el partido destrozados. No conseguimos llevarnos la Copa, pero el sentimiento de unidad que se creó, fue clave para el posterior ascenso.
-¿Te ves jugado 100 partidos más?
-Me veo acabando esta temporada. A partir de ahí, iremos pensando en el futuro. Es algo que no depende de mi y ya en verano tomaremos decisiones.
-¿Crees que esta está siendo tu mejor temporada como azulino?
-A nivel personal estoy bien. Estoy totalmente adaptado a la ciudad y al club, físicamente me encuentro bien y se tengo más responsabilidad dentro del equipo. Se ha juntado todo y estoy disfrutando mucho esta temporada.
-¿Puede que el secreto de la mejora haya estado en poder recuperar el dorsal 10 en camiseta?
-Ha costado. Negocié con Gatell durante los dos último años para ver si podía conseguir el número 10, pero no pudo ser. Este número ha sido mi número de toda la vida. Una de las razones es porque desde pequeño veía a mi hermano jugar con ese dorsal y él siempre ha sido un ejemplo para mi.
-Y hablando de la actual temporada. ¿cuáles son ahora los objetivos que os marcáis?
-El objetivo es acabar la liga regular lo mejor posible y con las ideas mas claras para plasmar ese trabajo. A todos nos gustaría quedar campeón de playoffs, pero si ahora pensamos en eso nos equivocamos. Tenemos muchos partidos por delante y tenemos que aprovecharlos.
-Hay más vida allá del baloncesto. Tu precisamente lo sabes mejor que nadie ya que estas terminando la carrera de nutrición, ¿Se hace duro?
-Es duro pero necesario. Al final los deportistas tenemos muchas horas libres y creo que hay que saber aprovecharlas. Lo bueno de venir a Melilla fue que pude organizarme y pude dar el paso adelante. Mucha gente me ayudó y gracias a ellas estoy a punto de terminar y muy ilusionado.
-¿Te ves aplicando tus estudios al ámbito deportivo y te gustaría ir por otra rama?
-Me gustaría enfocarlo al tema deportivo. La nutrición cada es más necesaria en un deportista a todos los niveles y tiene más protagonismo. Ahora quiero terminar mi formación de la mejor manera posible y ponerla en la practica lo antes posible.
-También destaca de ti que eras un persona que siempre se preocupa por aspectos sociales, ¿tan importante lo consideras?
-Somos la cara visible de una ciudad y representamos a Melilla. Personalmente creo que tenemos que ser conscientes de los problemas que ocurren en la ciudad en la estamos día a día. Se critican en ciertos aspectos, pero tenemos que estar ahí para ayudar y aportar nuestro granito de arena para que se vea que no todo es malo.
-Por último, ¿Qué significa Melilla para ti?
-Melilla es una ciudad importante en mi vida. Aquí he empecé a estudiar y quiero seguir formándome. A nivel personal he crecido mucho y deportivo ha sido la confirmación de un circulo que se cierra. Volví a LEB con la intención de ser mejor jugador y conseguir un ascenso. Al final lo conseguí y eso nadie me lo puede quitar. Son tres años aquí, porque me siento a gusto y agradecido a Melilla.