Son muchas las lecciones que el consejero de Economía y Políticas Sociales cree que ha aprendido la sociedad española con esta crisis sanitaria, como que se hayan reforzado las unidades familiares y se hayan estrechado los contactos entre padres e hijos. Mohamed Mohand asevera que la gestión de la crisis sanitaria no ha acabado. Afirma que siguen trabajando, como el primer minuto, porque los datos epidemiológicos así lo requieren. Explica que estos datos ahora son buenos, pero eso no significa que no puedan empeorar y, por ello la actitud y el trabajo deben continuar. Su valoración de la gestión es positiva en relación a que se ha evitado que se colapse el sistema sanitario y también se ha evitado una transmisión comunitaria descontrolada. Y esto ha sido posible gracias a la gestión realizada por las administraciones, aunque remarca que si esa gestión ha sido buena es porque se adoptaron una serie de decisiones al inicio de esta pandemia que han llevado a esas dos conclusiones que indicaba. Fue importante aislar a la ciudad con el cierre de las conexiones aéreas y marítimas y fue un éxito
También nuestra ciudad se adelantó 48 horas a considerar a Madrid como una zona de riesgo. Y eso ayudó a hacer PCR a la gente que venía de Madrid con síntomas. Es más, se hacían controles desde el primer minuto en puerto y aeropuerto. Y también fue fundamental, afirma Mohamed Mohand, el seguimiento epidemiológico realizado desde el primer momento; que se acogiera a todas las personas que estaban en la calle; el cierre de la actividad educativa; e incluso la orden del cierre de la hostelería antes del estado de alarma. “Son diferentes puntos que nos permitieron adelantarnos un poco y ahí está la esencia de los resultados actuales”, añade. No obstante, el consejero de Políticas Sociales destaca que el virus sigue aquí aunque no se haya detectado ningún caso en estos días en Melilla. Indica que se hacen 40 PCR al día en personas que tienen síntomas, aunque sean muy leves. Por ello, insiste en que se va a seguir trabajando igual de constante desde las instituciones para luchar contra el coronavirus. De hecho, una de las lecciones que ha aprendido como consejero es en materia de gestión. Mohamed Mohand subraya que el gran trabajo en esta crisis lo han hecho los profesionales sanitarios y para ellos desea que se conceda la Medalla de Oro de la Ciudad. Pero indica que desde la administración pública ha sido la imagen, voz y el brazo ejecutor de las medidas. “He aprendido mucho de gestión a nivel particular, como a prever necesidades”. Y en cuanto a la sociedad, también cree que ha aprendido la gente las lecciones que deja el virus, como a ser más consciente del valor de la familia; cómo ha mejorado la naturaleza con la inacción del ser humano; y también se ha visto en esta crisis, añade, que la sociedad es fuerte, unida y ha podido sobrevivir a esta crisis que hacía 100 años que no se producía en este sentido. Afirma que dice este último por la gran cantidad de voluntarios que ha habido en Melilla. Además, el consejero de Políticas Sociales dice que una lección que deja el virus es que los partidos han tenido que trabajar unidos. Destaca que él no ha querido entrar en rencillas entre partidos y ha dejado al margen cuestiones políticas o de interés partidista o personales porque entendía que era el momento de actuar juntos. Afirma que no ha criticado a partidos de la oposición y les ha agradecido sus gestiones, como las que hizo el senador Juan José Imbroda para traer mascarillas o con la Junta de Andalucía para conseguir test. En cuanto a si hay temor en reabrir las conexiones aéreas, afirma que siempre existe este miedo. Afirma que todos hemos vivido semanas duras que han provocado consecuencias psicológicas, como el miedo a abrirnos nosotros a los demás. Pero poco a poco se hará. Aunque remarca que todo el equipo de Salud Pública trabaja con la máxima prudencia, como lo ha demostrado, asevera. Dice que se darán pasos seguros y se abrirán las conexiones de forma progresiva. De hecho, ahora se pasa de 20 a 50 las plazas en los barcos. Y asevera que no se van a eliminar los controles en el puerto. En cuanto al aeropuerto, serán pocas las conexiones con vuelos y para finales de junio. “Tenemos que abrirnos y no podemos aislarnos. Hay que dejar de tener miedo, pero manteniendo el respeto al virus y, por ello, seguirán los controles sanitarios, así como el aforo”. Todo eso se hará para evitar un rebrote de la enfermedad. Subraya que sería muy duro sufrir uno, no solo para el sistema sanitario, sino para la economía del país. Insiste en que hay que ser cautos para evitarlo. Para Mohamed Mohand, hay dos momentos duros en esta crisis sanitaria. El primero de ellos es las dos muertes de los melillenses que ha sufrido la ciudad. El segundo fue ver que las instalaciones del V Pino se inundaban y que había que buscar un nuevo espacio para estas personas. En cuanto a los momentos buenos, destaca tres que afirma que están relacionados. El consejero de Políticas Sociales afirma la alegría que supuso para todo el equipo de Salud Pública conocer que el Ministerio de Transportes aceptaba la petición de cerrar las conexiones marítimas y aéreas al inicio de la pandemia. Dice que se gritó como si España hubiera marcado un gol en la final de un mundial. El segundo momento era cuando llegaban las PCR negativas de población vulnerable, como trabajadores del CETI, de un médico o un policía local. “Y los primeros curados los voy a recordar toda la vida”. Pero el día más feliz y se vio en las caras con sonrisas de oreja a oreja y los corazones latiendo fuerte, añade, fue el primer día con cero casos activos. Fue como si les hubiera tocado el Euromillones, remarca Mohamed Mohand.
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