La Semana Santa de este año ha sido una de las mejores que se recuerdan. Miles de personas han salido durante toda la semana para ver de cerca las procesiones. Así lo afirman a El Faro varios comerciantes del centro de la ciudad, que aseguran estar contentos con el impacto que ha tenido en sus negocios esta festividad.
"No hemos tenido tiempo ni para respirar", destacó a este diario Mohamed, camarero de la cafetería 'La Selecta'. La hostelería, o al menos los negocios que se encuentran en el centro de la ciudad, han sido los más beneficiados. En 'La Selecta' más aún ya que se encuentra en pleno recorrido oficial de las procesiones y a la mayoría de melillenses que han acompañado a los pasos y tronos les pillaba de paso.
"Estaba el centro lleno, pero hemos podido sacar el trabajo hacia adelante", reconoció Mohamed, que no recuerda una Semana Santa con tanta gente en las calles. Este camarero apuntó que la ciudad ha estado animada y que espera que sea un presagio de lo que queda por llegar.
Pero no es un hecho puntual. En la 'Cafetería Rossy' Abdelkader, uno de sus camareros, ha recalcado que el centro "daba alegría verlo" con tanta afluencia de público y que esto se ha visto reflejado en la caja del negocio donde trabaja.
En un primer momento, apunta, pensaban que por las fechas en las que se ha celebrado la Semana Santa que ha coincidido con tiempos de Ramadán y después de la Semana Blanca, iba a ser una época floja, pero los datos demuestran que no ha sido así. "Fue una locura", insistió Abdelkader. Hasta en los días más flojos de la semana como son Lunes o Martes Santo recibieron más clientes de los esperados.
Pero si hay un producto que define a la Semana Santa este sin duda son las torrijas. En la panadería Royal no recuerdan haber vendido tal cantidad de este dulce como lo han hecho este año. "Hemos vendido bastantes torrijas, más que otros años en comparación", comentó a El Faro Anisha, propietaria del negocio, que destacó que le ha encantado ver el centro tan lleno estos días.
Para ella, este éxito ha sido en parte gracias a los turistas que han visitado la ciudad y han querido probar lo más típico de este tiempo. Cabe recordar que el Sábado Santo atracó en Melilla el segundo crucero de este año.
A pesar de estas buenas cifras de algunos negocios de hostelería del centro, el presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Melilla, Chakib Mohamed, no comparte esta visión tan positiva y afirma que los restaurantes y cafeterías de Melilla llevan desde el inicio de la Semana Blanca vacíos.
Según subraya Mohamed han sido las cafeterías las que han recibido más clientes, sobre todo por las noches en los días más señalados de la Semana Santa, en contrapunto con los restaurantes.
"La Semana Blanca ha sido fatal, se ha ido Melilla entera y los pocos que han venido solo se dejan notar en el centro", añadió el presidente de los hosteleros.
En otros negocios del centro también valoran positivamente la Semana de Pasión. En 'Paco Milán', su propietario Paco García ha explicado que en su local ha habido más movimiento los días previos a los festivos. Ya el Sábado Santo, considera que fue un día perdido aunque no ve relación entre la Semana Santa y la afluencia de clientes. “Creo que son coincidencias, hay veces que sale bien y otras que no”, dijo.
Aún así la mayoría de clientes de estos días asegura que han sido personas que por su cargo o puesto ha necesitado ir vestido elegante esta Semana Santa como hombres de tronos o cofrades ya que su tienda está especializada en trajes de caballero.
De igual manera ha ocurrido en la 'Peluquería Margar' desde donde trasladan a este diario que se ha notado que algunas de sus clientas habituales salieron fuera de Melilla a pasar estos días, pero que aún así las que se quedaron no faltaron a su cita en la peluquería para estar arregladas durante los días de Semana Santa.
Por su parte el presidente de la Confederación de Empresarios de Melilla, Enrique Alcoba, se suscribe a lo dicho por el presidente de los hosteleros e insiste en que no se ha notado la afluencia de público en los comercios de la ciudad. Alcoba apuntó que hay que entender que es una semana de vacaciones, en la que la gente se va fuera aprovechando los días de fiesta. Una situación, dijo, totalmente contraria a la que ocurre en otras ciudades de la península que reciben mucho turismo. "No es una semana en la que vienen muchos turistas a Melilla", destacó.
“No compensa las muchas personas que se han ido con las pocas que han venido”, recalcó Alcoba a El Faro, que subrayó que son días en los que se nota en los comercios la falta de personas en la ciudad que se han ido de vacaciones fuera.
Asimismo, el presidente de la CEME vaticinó que en la hostelería sí que se ha podido ver reflejado "porque la gente ha estado en las calles en las procesiones, pero no en los comercios".