Forma parte del programa PISEL y permite a estos usuarios recibir una beca mensual de 150€
El Consejo de Gobierno de Melilla del pasado 20 de abril acordó destinar 57.000 euros para ayudar a formarse a persona con adicciones.
Dentro de las competencias de la Consejería de Presidencia y Salud Pública en materia de drogodependencia se encuentra el programa PISEL (Inserción Socio Educativa Laboral). Entre las actividades de esta iniciativa, se exige impartir módulos para dar conocimientos prácticos a los usuarios orientados a conseguir habilidades y técnicas que faciliten su inserción laboral y social. Asimismo, esta actividad sirve de terapia ocupacional, indican las bases publicadas en el Boletín Oficial de Melilla (BOME) del pasado viernes 27 de abril.
Los beneficiarios de estas ayudas serán usuarios del Centro de Día de Atención a Personas con Problemas de Acción que participen en el Programa PISEL. Además, deben contar con los siguientes requisitos: ser mayor de 16 años, ser español o tener la residencia legal en España, acreditar un padrón de más de un año en Melilla y la asistencia a programas de tratamiento o deshabituación por el consumo de sustancias adictivas en cualquier institución pública de la ciudad.
La ayuda económica no superará los 6,81 euros al día por asistencia a un curso y en ningún caso, serán más de 150 euros mensuales. Esta aportación es compatible con otras prestaciones sociales.
Los interesados en esta ayuda tienen dos meses para solicitarla. Deberán entregar su petición junto a una fotocopia del DNI, el certificado de empadronamiento y el certificado de estar en un programa de tratamiento. Una vez que se publiquen los listados de personas admitidas o no para recibir esta aportación, habrá diez días para presentar una reclamación.
Por otro lado, las bases recogen que los beneficiarios de la ayuda estarán sometidos a un régimen disciplinario. Las faltas graves no prescribirán y estarán en vigor durante todo el desarrollo de la actividad e implicarán la pérdida de la cantidad de la beca correspondiente a un día por cada falta cometida. No se admitirán faltas justificadas por encima del 25% de las jornadas lectivas en un mes y puede suponer la expulsión.
Las faltas graves son: dos faltas de asistencia sin justificar en un mes; dar positivo en analítica a cualquier sustancia que se considere estupefaciente; el olvido o la negación a la analítica; el consumo de sustancias en el centro; traficar con ellas en el centro y una falta de respeto a un compañero.