Con motivo de la festividad de Nuestra Señora del Carmen ayer domingo 16 de julio, se celebró una misa en la parroquia castrense de Melilla, a la que asistieron el comandante general de Melilla, general de División Luis Sáez Rocandio y la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, entre otras autoridades civiles y militares.
Al finalizar la celebración de la eucaristía, se realizó un acto de homenaje a los caídos en el que el comandante naval, capitán de navío Eduardo Estrella Suanzes, acompañado de la viuda de Carlos Esquembri Hinojo, funcionario del servicio de Vigilancia Aduanera, que perdió la vida en una operación marítima de lucha contra el contrabando, depositaron una corona de flores a los pies de la Virgen del Carmen.
Posteriormente, la Comandancia Naval de Melilla llevó a cabo un acto militar en el Real Club Marítimo, que fue presidido por el comandante naval y contó con la presencia de las autoridades ya citadas.
En dicho acto, se impuso la Cruz al Mérito Naval con Distintivo Blanco a José Manuel Gámez Castellano, comisario principal, jefe regional de Operaciones de la Jefatura Superior de Policía de Melilla.
Durante su alocución, el capitán de navío Estrella, hizo balance del año naval que finalizó el pasado 30 de junio y compartió con los asistentes la gran satisfacción de la Armada por haber respondido, no sin esfuerzo, a todos sus compromisos nacionales e internacionales. Entre estos últimos, el comandante naval destacó la activación y proyección del Grupo expedicionario anfibio “Dédalo-23”, que consistió en el despliegue, sin precedentes, de una Agrupación organizada sobre la base del Grupo de Proyección de la Flota (“Juan Carlos I”, “Galicia”, “Castilla”, “Victoria”, “Blas de Lezo”, el submarino “Tramontana” y el Buque de Aprovisionamiento de Combate “Cantabria”) y del Tercio de Armada, que operó en el Mediterráneo desde el 16 ENE durante más de dos meses.
Asimismo, el capitán de navío Eduardo Estrella Suanzes hizo una especial mención a dos grandes marinos que perdieron su vida este año; el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada, Antonio Martorell Lacave y el funcionario del servicio de Vigilancia Aduanera Carlos Esquembri.
El comandante naval finalizó su alocución encomendando a la Virgen del Carmen a los barcos de la Compañía de Mar, que este año celebra su 525 aniversario, la más antigua del ejército español; a los pesqueros, a los mercantes, a las embarcaciones de recreo, a los buques científicos y unidades de la Armada.