El candidato al Congreso por Vox Melilla, José Antonio Herraiz, asegura que su objetivo es escuchar a los ciudadanos y llevar sus problemas y demandas a Madrid.
–El líder de su partido aseguraba que era Marruecos quien debía pagar el coste de la construcción de un muro entre Melilla y el país vecino. En cambio, en Vox Melilla hablan de un muro psicológico. ¿A qué se refieren?
–La palabra muro resulta, al menos, llamativa. Para nosotros lo que se busca, el objetivo, es impermeabilizar la frontera. La idea es que sea una frontera impermeable para lo no deseable y una frontera para lo deseado. Eso significa que la frontera debe permitir el comercio, como se hace de forma natural entre los dos países. Debe permitir la llegada de personas que vengan a visitar Melilla con un sistema tecnológicamente avanzado y que permita la entrada y salida sin colas de horas. Además, no debe permitir que las personas no documentadas puedan entrar, por una sencilla razón, porque Melilla es la primera frontera en el sur de África de España y de la UE, así que por responsabilidad con el resto de Europa no se debería. Nosotros estamos de acuerdo con lo que se quiera implementar dentro del concepto seguridad que impida que lo no deseado acceda a Melilla. Si es un vallado perimétrico con medidas seguridad y más tecnología, pues perfecto. También puede ser un sistema complementario con tecnología avanza y sin nada en el terreno, pero a la hora de entrar en Melilla la Guardia Civil reciba el aviso se pueda actuar; o un muro de 250 metros. La palabra muro psicológico significa que hay que evitar que desde las instituciones se haga un efecto llamada a las personas que están en su país sin medios de vida, asegurando que aquí vale todo, cuando no es así. A esto le llamo yo muro psicológico: el hecho de no implementar el efecto llamada. Yo le abro la puerta de mi casa a quien llama, no a quién viene a saltar mi hogar. Éste es el concepto de muro psicológico. Estamos de acuerdo con que cualquier tecnología que haya en el momento que garantice la impermeabilización de la frontera es bienvenida. No hace falta un muro de cemento. A los melillenses nos gusta ver el Gurugú y si creas un muro de cemento pues no se va a ver. La situación es que haya pasos fronterizos que faciliten la entrada de salida de personas con documentación y que la frontera se impermeabilice con medios tecnológicos y con más Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
–¿De qué depende que se use un método u otro?
–Hay empresas a nivel internacional que se dedican a esto y se busca la garantía de que lo que se instale funcione para impedir entradas de lo no deseado. La situación actual de la frontera no sirve. No han servido las inversiones realizadas. Pero lo que puede entender cualquier persona es que yo tengo la puerta de mi casa cerrada para que el que quiera venir, llame y le abro o no según sus intenciones. Éste es el mismo concepto que tenemos que aplicar en nuestra frontera para evitar, entre otras cosas, los saltos a la valla. Además, eso es inhumano. Para evitar ese camino de su país a Melilla con el mal trato que reciben estas personas, se deben hacer inversiones en estas naciones de origen para evitar esos desplazamientos. Sin efecto llamada de las instituciones y con inversiones en los países de origen, se diminuiría la presión en la valla de forma radical. Lo que no se puede hacer es que venga todo el mundo porque no es cierto y, entre otras cosas, porque tenemos una tasa de paro de más de tres millones de personas. Los puestos de trabajo que pueden ser ocupados por los naturales del país, pueden ocuparse por extranjeros, en algunas ocasiones, de manera ilegal. Mientras que la persona que viene de manera legal es uno más de nosotros
–Melilla solo tiene a un diputado en el Congreso. ¿Cómo defenderá a la ciudad?
–No voy a estar solo. También estaré con mi compañero de Ceuta. Juntos daremos opinión de las ciudades extrapeninsulares. Pero, además, estaremos integrados en el mismo concepto que tiene Vox de España. Lo bonito de este proyecto es que el concepto de integridad de la patria, que se puede aplicar en cualquier parte del país, se puede hacer también aquí. Hay peculiaridades y se tendrán en cuenta en los programas locales y luego la directiva nacional asumirá ese proyecto. Con lo cual no voy a estar solo, sino que estaré con el resto de candidatos de Vox. Si Melilla tiene una necesidad, los diputados de Vox votarán para apoyar la medida.
–En Melilla solo se saca el diputado si es la formación más votada. ¿Lo ve posible?
–Pues es duro porque tengo mucha amistad con el candidato al Congreso del PP (Fernando Gutiérrez Díaz de Otazu) y Coalición por Melilla (Mustafa Aberchán). Estamos en proyectos diferentes. Espero que gane el que honradamente gane más votos y ya está. Es algo tan natural como la democracia. La gente vota y si eres el que ha recogido más apoyos, pues representarás las ciudad. Pero, con independencia de que salga uno u otro, lo que hay que tener claro es que no será el diputado de Vox, del PP o de CpM, sino el diputado de los melillenses. Ese es al menos el criterio de Vox. Si salgo, pelearé por todo lo de Melilla.
–¿Cuáles son las propuestas que va a plantear en Madrid?
–El programa para las elecciones locales aún no está cerrado porque seguimos trabajando en él. Pero hay líneas maestras que están claras. El programa de Vox tiene 100 puntos para esta campaña electoral nacional y luego habrá otros tantos para las locales. Un primer concepto es que estamos al servicio de los melillenses. Eso significa que hay que oír a los melillenses y no puedo tener una iniciativa propia sin saber lo que opinan los melillenses. Las inquietudes de los ciudadanos deben ser prioridad porque somos sus representantes en las Cortes. Dicho esto buscaremos el bienestar del melillense y cuenta con varias patas que sostienen esta idea. Una de ellas es la seguridad. El ciudadano tiene que estar seguro en su casa que es Melilla. Otro punto es el trabajo. El objetivo de Vox para dar tranquilidad social y aportar impuestos es generar empleos. Se busca el paro cero. Vamos a luchar por él hasta donde haga falta. La sanidad es otro ámbito. No puede ser que la sanidad de Melilla se base en un hospital que está sobresaturado con colas de atención habiendo profesionales excepcionales. Tendrá que haber como mínimo otro hospital. Además, la sanidad está conectada con la frontera. No podemos abrir nuestra puerta sin más. Tiene que ser un filtro sanitario porque desde hace años están apareciendo enfermedades en España porque no hay filtros sanitarios en las fronteras. No significa que a un enfermo se le vaya a dejar sin asistencia, sino que habrá que hacer un espacio de cuarentena para este tipo de casos. Asimismo, otro pilar es cómo implementar el turismo para que la población de Melilla tenga infraestructuras adecuadas, que el avión pueda ser de mayor capacidad o un barco que tarde menos... Una serie de medidas que potencien el turismo. Una de ellas, que saldrá en el programa local, es que, junto al Imserso, los ciudadanos jubilados, que son los que más disponibilidad de tiempo tienen, que puedan venir a Melilla. Se beneficiarían hoteles y hosteleros. Habría que hacer convenios nacionales para que este colectivo pueda venir y se podría lograr no subvencionando, sino dotando de precios adecuados a paquetes turísticos. Esto está en mano de la Ciudad. Igual que el melillense tiene ventajas para viajar, por qué un jubilado de España no va a tener unas condiciones específicas para venir a Melilla. Esa es una de las medidas y pensamos que sería muy beneficioso para el comercio. Se trata de visitas masivas y de barcos completos en dos o tres ocasiones al mes. Sería simular a cuando a Melilla venían las visitas de familiares para la jura de bandera de los jóvenes que hacían el servicio militar. Es un sistema bueno de reactivar la economía.
–Habla del paro cero. ¿Cómo lograr eso en una ciudad donde la mayor parte de los parados no tienen formación?
–Hay una medida sencilla. Se la he escuchado a nuestro presidente en una ocasión. El paro cero es ni más ni menos que implementar criterios económicos para que la empresa privada se motive para contratar a otras personas. En este sentido, si se mejora en el turismo, cualquier empresa relacionada con el sector necesitará más trabajadores y se creará empleo. Otra cuestión sería atraer y afincar empresas tecnológicas como lo hace Irlanda y Portugal. ¿Por qué estos países tienen un despegue importante? Porque han tomado medidas relacionadas con este tipo de empresas al rebajar la fiscalidad que tiene que pagar estos negocios y por ello, radican allí sus sedes. ¿Por qué no hace eso Melilla? Otra medida eficaz sería que un autónomo contrate a otro y que el contratado tenga una fiscalidad mínima. El Estado no pierde nada porque al estar en paro ya no se le paga el desempleo, aunque se podría dar un beneficio al contratante. Habría lista cero de desempleados y se cotizaría a la Seguridad Social. En un sitio tan pequeño como Melilla es totalmente viable.
–Hablaba de sanidad. ¿Qué se puede hacer por mejorarla?
–El otro día fui a ver a un familiar al hospital y vi sus condiciones. Sé que los profesionales hacen todo lo posible, pero no podemos tener esas condiciones. Vox propone que a cualquier español se le dé la posibilidad de acogerse a un sistema mixto de salud. Igual que los funcionarios actualmente tienen la posibilidad de estar en la Seguridad Social y en una entidad privada, que el ciudadano normal tenga la misma opción. Eso implicaría una descarga de la Seguridad Social de ese ‘overbooking’ que tiene y se da la posibilidad de dar mejor cobertura. El coste va a ser igual. Además, en el caso de Melilla, cualquier clínica privada crecería y vendrían más médicos y otros sanitarios generando puestos de trabajo. Es eso porque no podemos tener cuatro hospitales. Es que el Estado no puede estar subvencionando la sanidad al completo. Hay que dejar que las entidades privadas puedan dar el servicio y que ese presupuesto que tiene de Seguridad Social dando la opción al ciudadano de pie de que escoja. Al final es dinero que va a un sitio u otro, pero al menos el servicio del sistema público se descarga. También las clínicas privadas potenciarían sus servicios actuales.
–¿Cómo afrontaría el problema del elevado número de menores extranjeros no acompañados?
–Es una situación generada ya. En nuestro programa aparece que no habrá inmigración ilegal porque se contactará con el país de origen de la persona y deberá volver. Habrá que ver el punto de la ley que hay que aplicar en este caso. Vox no es políticamente correcto. Simplemente aplicamos la ley que corresponda. No se puede no cumplir la ley. Si los niños están aquí dando vueltas y no están atendidos, se debe aplicar la ley. Es una cosa simple. Si la ley no es correcta, debe cambiarse. Pero si la ley dice que no puede haber nadie ilegal, habrá que poner a esa persona a disposición de la entidad que corresponda, como la justicia o la Policía. El objetivo es aplicar la ley.
–¿Qué medidas implementarían en educación?
–Yo creo que hay que preguntar a las personas que saben. En este sentido, en el informe ‘Ranking de Excelencia Educativa 2019’ se describen nueve medidas para mejorar el sistema educativo. Una de ellas es que debe haber un consenso. No puede ir cada comunidad por libre. También se recomienda un programa social y programas educativos adecuados a la realidad. La libertad de elección de los centros por los padres, porque no son los colegios donde se educa, sino en las casas. Es otro de los asuntos. Recomiendan que haya un modelo de excelencia en que basar las políticas. También tiene que haber una prioridad en el presupuesto. Asimismo, se exige la responsabilidad de la familia y un compromiso por parte de los padres con la educación. Además, remarca que hay que reforzar la autoridad del profesor, porque no es un amigo y dar protagonismo al alumno.
–¿Tienen algún proyecto especial en materia de infraestructuras, como el puerto o el aeropuerto?
–El día de mi presentación dije que uno de los puntos en los que vamos a trabajar es en las infraestructuras. Para mejorarlas se precisa liberar terrenos. Tenemos parcelas, pero hay que liberarlas para poder ocupar ese espacio como ampliación del puerto o del aeropuerto, generar espacios deportivos... Al principio es liberar terreno para que dé servicio a la población y se use para lo que demande la sociedad. Cuando se libera terreno se pueden construir o renovar infraestructuras. También la mejora de edificios que se pueden remodelar para construir más plantas superiores es algo que veo bien de algunos constructores, porque esa medida buena genera más viviendas y empleo. Además, si queremos promocionar el turismo el aeropuerto y el puerto tienen que potenciar su servicio. La pista del aeropuerto habrá que verla por si pueden venir aviones más grandes y de más lejos que nos interese. Creo que tenemos que ver las experiencias de zonas donde haya mejorado el turismo o las infraestructuras y aplicarlas en Melilla.
El efecto llamada es simple y llanamente que un país esté más desarrollado que otro. Igual que ha ocurrido en España, que miles de jóvenes han migrado a países como Gran Bretaña o Alemania porque había más posibilidades de trabajo. Lo de trabajar en el país de origen es lo que evitaría ese mal denominado efecto llamada, que realmente debería llamarse efecto salida.
Si lo teneis tan claro, cómo es que no lo han hecho los demás políticos en tantos años?. Todos venís a decir cosas que no vais a hacer y que además es imposible.
Melilla está dejada de todos y cada uno de politicos, y sólo vais por ahí cuando queréis coger votos.