El aeropuerto de Melilla recibirá una inversión de cerca de 6 millones (5.859.000 euros) entre 2022 y 2026. Así lo recoge el Documento de Regulación Aeroportuario, que incluye otros 2 millones para Ceuta para el mismo quinquenio.
Según explicó el director de Infraestructuras del aeropuerto de Melilla, Miguel Palomares, son cifras conservadoras, que mantienen las inversiones ya previstas anteriormente.
Según esas previsiones, en 2022 Melilla tendrá asignados, atendiendo a este documento elaborado por el Ministerio de Transportes, 328.000 euros.
De esa partida, 16.000 irán a sostenibilidad medioambiental; 103.000 euros son para adecuar los pavimentos; 21.000 para desarrollar y mejorar ayudas a la navegación y 188.000 son para inversiones de apoyo y reposición.
La inversión será mayor en 2023, cuando está previsto que el aeropuerto de Melilla reciba 3.114.000 euros. La mayor parte de ese dinero se invertirá en el incremento de la seguridad (1.358.000 euros) y en la adecuación de pavimentos (1.345.000 euros).
Aparte hay 27.000 euros para sostenibilidad medioambiental; otros 210.000 para desarrollo y mejora de la navegación y 173.000 para inversiones de apoyo y reposición.
La inversión de 2023 es la más cuantiosa de las que están previstas por el Ministerio de Transportes entre 2022 y 2026.
Para 2024, el Ministerio de Transportes prevé destinar a Melilla 2 millones de euros. A partir de ahí, desciende el monto que pasa a 200.000 en 2025 y 143.000 en 2026.
Llama la atención que ninguna de las inversiones previstas en el aeropuerto de Melilla son relevantes o estratégicas. Aquí sólo se recibirá dinero para llevar a cabo modificaciones normativas o clasificadas en la categoría de "otras".
Por el contrario, Ceuta, pese a tener menos dinero destinado a inversiones (2 millones), consigue como inversión relevante de 1,5 millones de euros que está previsto que se destinen a incrementar la seguridad operacional el año que viene.
Los datos des siguientes tablas son en millones. Con (N) están marcadas las inversiones normativas, con (O) las del apartado de (Otras) y con (R), las relevantes.)
Justo este viernes el director de infraestructuras del aeropuerto de Melilla descartó que en el corto plazo se pueda modificar el sistema de aproximación de aviones con incursiones en cielo marroquí porque eso requiere negociaciones con el país vecino a largo plazo.
De 2022 a 2026 está previsto que se inviertan 2.250 millones de euros de euros en toda la red de aeropuertos de España, lo que se traduce en un gasto medio de 450 millones por anualidad con la intención de paliar los efectos de la pandemia en el tráfico aéreo.
Beneficiarios del fracaso de El Prat
El aeródromo local es uno de los beneficiarios de la malograda ampliación de la tercera pista del aeropuerto del Barcelona-El Prat por las dudas medioambientales que arrojaba el proyecto y que provocaron la pérdida de confianza del Gobierno de España respecto al Ejecutivo de Cataluña.
Este proyecto de ampliación del Prat suponía una partida adicional de 120 millones de euros, que es la que se ha repartido en proyectos medioambientales en aeropuertos de toda España.
En concepto de sostenibilidad medioambiental, Melilla recibirá en total 217.000 euros en el quinquenio de 2022 a 2026, pese a que no percibirá ni un solo euro en este apartado en los ejercicios 2025 y 2026.
¿Para qué es el dinero?
La decisión de destinar casi 6 millones de euros al aeropuerto de Melilla y otros dos millones a Ceuta fue tomada este 28 de septiembre por el Consejo de Ministros, tras la aprobación del Documento de Regulación Aeroportuario (DORA), que establece las condiciones que deberán cumplirse en los aeropuertos de la red de AENA en materia de calidad ambiental y medio ambiente, capacidad e inversiones, así como la senda tarifaria para los próximos cinco años.
AENA se ha planteado como objetivo de 2022 a 2026 recuperar el tráfico aéreo y gestionar la red garantizando la seguridad y la calidad.
También pondrá énfasis en la sostenibilidad medioambiental y sitúa la innovación como pieza esencial para al eficiencia y la calidad del servicio.
En este sentido, el Documento de Regulación Aeroportuaria establece la congelación de las tarifas durante los próximos cinco años con la intención de atraer nuevas compañías aéreas.