Las hermanas del Centro María Inmaculada piden ayuda a los melillenses para comprar una nueva furgoneta. La que tienen actualmente está en el taller y cada vez necesita más reformas para poder marchar. Puede resultar una tontería, pero las religiosas del Monte María Cristina utilizan este vehículo para ir a recoger los alimentos que les donan los ciudadanos y también para repartirlos entre las personas necesitadas.
La furgoneta que está en el taller ha sufrido varias averías y las hermanas de María Inmaculada desearían poder comprar una nueva. Pero son muchos los gastos que hay en el centro porque no paran de llegar personas necesitadas demandando ayuda.
La directora del centro, Mercedes Moraleda, afirma que es una mala época para pedir más colaboración a los melillenses, ya que durante estas navidades han hecho un gran esfuerzo por echar una mano a las familias en riesgo de exclusión social. Destacó que gracias a la solidaridad de los melillenses han conseguido que muchos ciudadanos cuenten con alimentos suficientes todos estos días. Aún tienen los almacenes llenos de los productos que han donado las familias. Aunque saben que no van a durar mucho tiempo tan repletos de legumbres, pasta o leche. Hasta febrero no llega el siguente cargamento del Banco de Alimentos y no dejan de llegar a este centro personas demandando estos productos porque no tienen nada que comer en sus casas.