Fue sin duda una de las noticias más destacadas de las que dejó la jornada de ayer.
En clave política fue la más relevante. Tras más de cinco años de existencia, los militantes de Populares en Libertad (PPL) se integraron en el Partido Popular. En palabras del presidente del extinto PPL, Ignacio Velázquez, los integrantes de su formación “volvieron a la nave nodriza” que ‘pilota’ el también jefe del Gobierno local, Juan José Imbroda.
El pasado viernes, los miembros del partido que formó y presidió el propio Velázquez votaron a favor de la desaparición del mismo para, ayer mismo, presentar estos documentos ante los principales dirigentes del PP melillense y, posteriormente, pasar a ser afiliados de esta fuerza política.
Se pone fin así con cinco años de cisma en la corriente de los populares. Una disgregación del voto que no hacía más fuerte al PP. De hecho, Imbroda dijo ayer que la integración de los militantes de PPL en el PP hace más grande al partido al que él pertenece y preside en nuestra ciudad.
El presidente de la Ciudad también apostó por “mirar al futuro” y agregó que Melilla y las siglas del Partido Popular “están por encima de los agravios personales que pueda haber”.
“Si a lo largo de la vida de una persona, los agravios que se puedan sufrir los llevamos siempre en el corazón encerrados, seríamos unos desgraciados”, indicó Imbroda, tras decir que es prácticamente imposible hacer “borrón y cuenta nueva”, pero sí es factible mirar hacia delante.
Si algo han enseñado a los españoles los más de 300 días sin Gobierno central es que no es tiempo de personalismos, sino de ideas y propuestas. La ‘vuelta a casa’ de PPL es un claro ejemplo de unión de fuerzas con una única dirección.