La Fiscalía marroquí ha reabierto el caso del tráfico de recién nacidos entre Marruecos y España, un asunto que ya fue juzgado en 1985 en la ciudad de Nador. Según un comunicado de la Fiscalía General del Tribunal de Apelación de Nador divulgado por la agencia MAP, el fiscal ha dado orden a la Policía Judicial de reabrir la investigación tras destaparse de nuevo el caso en el lado español, sin que existan más precisiones sobre si hay nuevos elementos que lo justifiquen.
El comunicado relata que en 1985 un hombre y una mujer, de nacionalidad española, fueron detenidos en Nador con dos recién nacidos que supuestamente habían “comprado” por un millón de pesetas cada uno (unos 6.000 euros). Los bebés fueron entregados a una española residente en Melilla que contaba con la complicidad de su hermana, vecina de Tetuán.
La mujer de Melilla conseguía los bebés a través de una asistenta social en el hospital Al Hassani de Nador (a la que pagaban 100 dirhams, 90 euros, por cada niño) o con la ayuda de una trabajadora del hospital Al Farabi de la misma ciudad (a la que daban entre 2.000 y 2.300 dirhams, equivalentes a 190-220 euros).
El número total de bebés objeto de este tráfico ilícito ascendió a once, según quedó entonces establecido: Dos en 1978, cinco en 1979 y cuatro en 1985.
El juicio celebrado en 1985 concluyó con varias condenas de cinco años de cárcel por “hacer desaparecer a bebés y obstaculizar su identificación”, pero las penas fueron conmutadas más tarde a solo un año de prisión firme (el resto domiciliaria).
En España también se ha reabierto el caso y la Guardia Civil ya ha imputado a 31 personas por su supuesta vinculación en la compra de al menos 28 bebés marroquíes entre 1979 y 1985.