El sospechoso fue interceptado por una patrulla de la Policía Local en las inmediaciones del puesto fronterizo de Beni Enzar. El conductor del vehículo trató de escapar al verse descubierto, pero no consiguió llegar muy lejos. En las proximidades del puesto fronterizo de Beni Enzar, donde ocurrieron los hecho, se encontraba una patrulla de la Policía Local y evitó que pudiera escapar.
Esta intervención de la Guardia Civil tuvo lugar el pasado domingo, durante el control selectivo de vehículos que acceden desde Marruecos a Melilla. Uno de estos automóviles, un turismo marca Daewoo, modelo Cielo, de color granate y placas de matrícula marroquí, recibió el alto de los agentes para proceder a una inspección más minuciosa. En su interior, aparentemente, sólo viajaba una persona, su conductor, un joven de rasgos magrebíes.
Durante el examen del vehículo, los guardias civiles observaron una anomalía en el maletero y cuando iban a proceder a su inspección, el conductor de turismo emprendió una veloz huida hacia Melilla, señala la Comandancia de la Guardia Civil en una nota de prensa. De inmediato se inició una persecución en la que participaron varios agentes de la Benemérita. Sin embargo, finalmente fue una patrulla de la Policía Local quien consiguió interceptarlo. Los policías se encontraban regulando el tráfico en el exterior del recinto aduanero y fueron alertados para cortar la trayectoria del fugitivo, al que lograron detener después de inmovilizarlo.
Al mismo tiempo, los guardias civiles localizaron a un joven subsahariano en el interior del vehículo. Se encontraba en un receptáculo realizado bajo el maletero y, tras forzar una parte de éste y del paragolpes trasero, consiguieron liberarle. El inmigrante, que no portaba documentación, dijo proceder de Guinea-Bissau, se identificó con un nombre que se corresponde con las iniciales B.B. y aseguró contar con sólo 17 años de edad. Presentaba síntomas de entumecimiento en todo el cuerpo, estaba agitado y desorientado y tenía dificultades para respirar. Necesitó ser auxiliado y a continuación fue conducido a un centro médico de urgencias.
En el doble fondo donde había llegado oculto el inmigrante también estaban las herramientas utilizadas para su construcción y posterior apertura, dado su hermetismo.
Los agentes identificaron al conductor de vehículo como M.E.I., de 25 años, de nacionalidad marroquí y con domicilio en Nador. La Comandancia asegura en su nota que el detenido no tiene ningún tipo de vinculación con Melilla. Los guardias civiles le pusieron a disposición judicial como presunto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.