La playa de la Alcazaba podría estar abierta al público la semana que viene y la de Horcas Coloradas grande, en julio.
El consejero de Medio Ambiente, José Ángel Pérez Calabuig, izó ayer la bandera azul en la playa de Los Cárabos de la ciudad. Este año, el 58% de la extensión de las playas de Melilla cuenta con este certificado que es “un garante de las calidades óptimas” de estas zonas de costa. Melilla tendrá por tanto este año dos banderas azules, ésta que abarca desde Los Cárabos a la Hípica y también otra para el Puerto Deportivo.
“El garante de bandera azul no es por lo que tenemos, sino por lo que hemos hecho”, indicó Pérez Calabuig. Así, destacó que la Ciudad lleva tres años consecutivos con bandera azul, es decir, “con calidad excelente” en sus playas, que “de nuevo se ha vuelto a conseguir”.
El consejero aseguró que si hubiera algún problema, de cualquier índole, no se hubiera podido obtener esta acreditación, ya que se deben superar hasta 24 puntos en los que se exige no sólo la calidad del baño, sino servicios de limpieza o accesibilidad para personas con discapacidad. “Es bueno para Melilla y para el señor que se bañe, pues sabe que la playa tiene calidad para su uso”, aseguró.
En cuanto a las playas de la zona norte, Pérez Calabuig explicó que se dividen en cuatro y que cada una de ellas presenta unas características especiales. La primera que pueden encontrar los melillenses situándose en Melilla La Vieja, la de los Galápagos, estuvo cerrada durante unos días, según apuntó el consejero. Esto se debió a que hubo unos desprendimientos de unas rocas. No obstante, Pérez Calabuig comentó que ya se ha saneado la zona y que está abierta para su uso.
Justo al lado de ésta, la playa de la Alcazaba, que estará abierta “si no hay ningún inconveniente” para la semana que viene, según explicó el consejero. No obstante, apuntó a que son muchos los melillenses que están acudiendo a bañarse a esta zona, que cuenta con socorrista, pero en la que aún se están colocando los elementos de seguridad y arreglando las escaleras de bajada.
De las dos que hay en Horcas Coloradas, la pequeña sí está abierta al público y cuenta con todos los servicios y los certificados de costas, según informó el consejero.
Pérez Calabuig comentó que la playa grande de Horcas Coloradas podría estar operativa para su uso por parte de los ciudadanos a principios de julio. “Aún se están retirando los hierros que son los elementos cortantes y peligrosos para el baño”, explicó el consejero. Una vez que esté limpia, la Ciudad pondrá la arena que necesita en unos días, según destacó.
El informe de Guelaya
El titular de Medio Ambiente comentó el informe que presentó Guelaya-Ecologistas en Acción donde se proponía la construcción de una planta de biometanización y otra de separado de residuos reciclables, como una alternativa sostenible frente a la incineradora. Al respecto, dijo que “Melilla la única solución que tiene en este momento es la incineradora”.
Pérez Calabuig comentó que instalar una planta de este tipo implicaría contar con un terreno “muy grande que no existe ahora mismo en Melilla”. Además, aseguró que los costes de este proyecto serían equivalentes a los de una planta incineradora, esto es, unos 24 o 25 millones de euros.
El consejero indicó que no se trata de tener un terreno y esperar a que se haga compost en unos días. “No funciona tan fácilmente”, explicó. Por ello, insistió en que “ahora mismo hay que esperar que un día haya un espacio suficiente y que la planta incineradora caduque”. Pérez Calabuig comentó que llegará un momento en el que “será obsoleta y vieja” y será entonces cuando se piense la solución más óptima para la ciudad.
El informe de Guelaya-Ecologistas en Acción también apuntaba a que ese proyecto implicaría que los melillenses dividieran la basura en orgánica e inorgánica y que su recogida fuera manual. Así, apuntaban que unas 100 personas podrían ser contratadas para este trabajo. En este sentido, el titular de Medio Ambiente sólo comentó que este tipo de proyectos “no está en los cálculos de la Ciudad.
“La Ciudad ha aportado muchas inversiones a la incineradora”
El consejero de Medio Ambiente, José Ángel Pérez Calabuig, aseguró que “es muy interesante” para Melilla que la Ciudad pase a ser la titular de la incineradora.
Pérez Calabuig indicó que de esta forma se regula el capital que cada administración ha puesto en este proyecto. El consejero explicó que inicialmente se puso un 50% por cada una de las partes para su construcción, pero que desde su funcionamiento, la Ciudad, ha aportado numerosas inversiones para las reformas y obras que se han realizado. “La Ciudad ha puesto más dinero que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y había que regularizar esa situación”, aseveró.
Pérez Calabuig explicó que la cesión del SEPI es una forma de reconocer toda la inversión realizada por la Ciudad en la incineradora. No obstante, destacó que se seguirá funcionando como hasta ahora y que no habrá cambios en su administración.