Esteban cree que se debe mejorar la oferta turística para que lleguen más barcos.
El Puerto de la Ciudad Autónoma recibió en la jornada de ayer al Saga Pearl II, el primero de los tres cruceros que está temporada atracarán en Melilla. Poco después del momento de su atraque, las 8:30 horas, comenzaron a verse por las calles del centro a los primeros turistas que bajaron a tierra. En total llegaron unos 377 pasajeros, la mayor parte de ellos de origen británico. Mientras que algunos de los visitantes optaron por las visitas al casco antiguo, otros se aventuraron por el centro modernista. Fuera de estas dos zonas, fue extraño ver turistas por las calles de Melilla, los cuales eran bastante reconocibles por sus sombreros de paja y la indumentaria veraniega que llevaban pese a que el otoño ya se ha instalado en la ciudad. Poco antes de las 14:00 horas, los visitantes volvían a embarcar en el Saga Pearl. Su próximo destino será Túnez. El presidente de la Autoridad Portuaria, Arturo Esteban, ofreció su opinión a los medios de comunicación sobre la llegada de un nuevo crucero a la ciudad tras algunos meses sin recibir ninguno. Así, destacó que era algo “altamente positivo para los ciudadanos, pues el tráfico de este tipo de naves es una gran fuente de negocios”. No obstante, consideró que a Melilla “le falta coordinación” para ofrecer a las navieras razones de peso para que incluyan a la ciudad entre sus destinos habituales del Mediterráneo sur. Así, conminó al Gobierno autonómico a negociar con la Autoridad Portuaria la creación de una comisión de estudio para establecer “una auténtica oferta de ocio y cultura a los turistas que viene abordo de estas embarcaciones”. “Tenemos que darle a los cruceristas razones para que vuelvan a Melilla”, añadió Esteban, quien recordó que la estrategia de las navieras es ofrecerle a los pasajeros una amplia gama de productos y servicios abordo para que consuman en el propio barco. “Debemos competir con los cruceros en ese terreno y hacer que los viajeros también gasten en tierra”, agregó. Por último, aseguró que gracias a la posición geográfica de la ciudad, es factible que se convierta en un destino típico dentro de los recorridos que las navieras realizan por el Mediterráneo, y que incluyen destinos como Marsella, Roma o Barcelona.