La Comisión Islámica de Melilla (CIM) atraviesa uno de sus momentos más críticos debido a problemas internos relacionados con la solicitud de disolución de la organización y la falta de subvención por parte de la Consejería de Cultura, Patrimonio Cultural y del Mayor. Esta situación ha generado una grave incertidumbre sobre el futuro de las actividades planificadas para los próximos meses, que estaban destinadas a promover el conocimiento cultural, la convivencia y la educación entre diversos colectivos.
Entre las iniciativas que se ven afectadas se encuentran, entre otros, un ciclo de conferencias todas en español a llevar a cabo en la UNED y en diferentes mezquitas a cargo de destacados oradores y divulgadores, que abordarían temas sociales, educativos y religiosos. Actividades lúdicas y de refuerzo educativo en valores dirigidas a más de cuarenta niños, que estaban programadas para que duraran tres meses. La organización de actividades y lectura de manifiesto para el día 29 de noviembre coincidiendo con motivo del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino.
Asimismo queda en suspenso una jornada formativa y de convivencia juvenil en una alquería en Granada, que tenía como objetivo reunir a cincuenta jóvenes en un ambiente de aprendizaje y reflexión. Además, la elaboración de una guía del patrimonio islámico de Melilla, un proyecto que pretendía resaltar y preservar la riqueza histórica y cultural de la comunidad musulmana en la región, también está en riesgo debido a la falta de fondos.
La falta de respuesta por parte de la Consejería de Cultura en cuanto a la concesión de subvenciones agrava aún más la situación, limitando la capacidad de la Federación CIM para llevar a cabo sus proyectos. La comunidad afectada ha expresado su preocupación ante la posibilidad de que estas actividades no se realicen, lo que tendría un impacto negativo en el desarrollo cultural y social que la Federación ha promovido durante años.
Esta vez, y dadas las circunstancias, según la CIM, peligran las actividades de Ramadán, así como la asistencia social a las familias más vulnerables. Ante esta situación, la directiva de la Federación CIM ha convocado varias reuniones y Asambleas de urgencia para tratar la situación y explorar posibles alternativas. Sin embargo, sin el apoyo económico necesario, el futuro de la organización y de sus actividades sigue siendo incierto.
Muchas personas que viven en Melilla hablan Amazhig pero no saben ni leerlo ni escribirlo
Viven en una sociedad que han elegido, que el idioma es el Español:, por diversas circunstancias,la primera es la economía,y tantas otras
Los protestos médicos ,los botes de legia, los incentivos van en Español,es decir viven en España proceden de Marruecos y en su país soñado hablaban Amazigh pero desconocen su propia escritura
Esto no es cuestión como se invonce a Dios ,la realidad social es que si no dominas el español no tienes oportunidad de estudiar,trabajar..
Razón;cuando en Ketama exista una Universidad tanto Científica cómo de Humanidades y se cursen licenciaturas en Amazigh hasta entonces estamos hablando de política barata