La incineradora de animales junto a un columbario se instalarán próximamente en la Granja Escuela. Así lo anunció el consejero de Medio Ambiente, Daniel Ventura.
El proyecto, que fue una iniciativa del gobierno del Partido Popular, sigue adelante, debido a que un particular quiere comprar la incineradora y ya existe una opción para el montaje de la misma. Se ha elegido la instalación de ambos en la propia Granja Escuela por lo apropiado del lugar.
Daniel Ventura afirmó que se está trabajando en ello, ya que no solamente es la incineradora de forma aislada, sino que se quiere poner un columbario para que las mascotas puedan estar en un sitio y puedan ser visitadas después de fallecidos.
La Consejería de Medio Ambiente también está estudiando la apertura de un cementerio para mascotas pero “es mucho más complicado” por el número de mascotas que se podrían encontrar y el espacio necesario.
Sin embargo, Ventura afirmó categóricamente que el columbario será una realidad vinculada al proyecto de la incineradora más pronto que tarde, pero no existe una fecha exacta para la inauguración.
La referencia que hizo el consejero sobre la capacidad de instalar un columbario y la inseguridad de poner un cementerio, es debido a que el columbario va directamente ligado a una incineradora de forma generalizada.
Las mascotas, una vez fallecidas, se queman en una incineradora y después en un tarro o caja; suele ser metálica o de cerámica, se vierten las cenizas y el dueño puede así quedarse con los restos de quien fue su compañero hasta que finalicen sus días.
Sin embargo, existe otra opción que es la del columbario, un lugar especial que dispone de pequeñas urnas donde se pueden tener las cenizas de las mascotas para que sean visitadas.
Muchas personas tras la muerte de sus mascotas, no quieren desprenderse de ellas y las dejan en casa para siempre, sin embargo otras, la presencia de los restos de su mascota en casa les puede causar cierta nostalgia o depresión, por lo que se ofrece un columbario donde pueda visitar a las cenizas de la mascota durante las horas de apertura del local.
No obstante, el cementerio de mascotas es igual que el de personas, con lo cual a las mascotas no se les incinera, se les entierra tal y como fallecieron. Lo que implica una extensión de terreno muy superior y por lo tanto esta circunstancia implica una mayor dificultad para su instalación.
Esto será para cuando le toque la lotería a la Ciudad Autónoma, así es, que ni decir tiene.