Los menores de edad abarcan en Melilla nueve de cada diez de las sanciones por infracciones de tráfico a conductores de vehículos de movilidad personal (VMP), patinetes eléctricos, fundamentalmente.
Según han informado fuentes de la Policía Local de Melilla, apenas el 10% de las infracciones sancionadas con este tipo de vehículos las cometen conductores adultos, una cifra mínima en comparación con la de los menores pero que, sin embargo, en este cuerpo de seguridad destacan como “una cifra bastante importante”.
En el caso de las sanciones a menores de edad, son sus padres o tutores legales los que deben asumir las consecuencias y, de hecho, durante la tramitación se refleja el nombre del padre, madre o tutor junto con el del menor infractor, han explicado las mismas fuentes.
La Consejería de Seguridad Ciudadana acaba de elaborar un reglamento para los VMP, que está pendiente de aprobación en la Asamblea de Melilla, que contempla sanciones económicas de entre 100 y 500 euros.
La ordenanza establece, igualmente, que la edad mínima para poder utilizar estos vehículos se sitúa en 16 años o bien aquellos conductores que tengan 15 años, pero que estén en posesión del carnet del permiso de conducir de ciclomotores. También se establece la obligatoriedad del uso del casco de protección.
Además, será preceptivo estar en posesión de un seguro de responsabilidad civil ante terceros para cubrir la indemnización de carácter subsidiario por los daños y perjuicios derivados del uso de estos vehículos.
Asimismo y con respecto al conductor, éste deberá tener una estatura mínima de 1,40 metros para que se favorezca su visibilidad. En caso de no cumplirse esta norma, el conductor tendrá que instalar un banderín que alcance una altura mínima de 1,50 metros.
La ordenanza elaborada por el Gobierno de la Ciudad delimita claramente las zonas por las que pueden transitar estos vehículos, quedando excluido el uso de aceras, parques o vías peatones.