La conferencia de la investigadora y escritora cerró el ciclo ‘Aquel verano del veintiuno’ con la proyección del documental francés ‘Abdelkrim El Jatabi y la Guerra del Rif’.
La figura de Abdelkrim El Jatabi, en ocasiones vista con cierta controversia, fue el protagonista ayer en la clausura de las jornadas ‘Aquel verano del veintiuno’ con motivo de la próxima celebración de los 90 años del Desastre de Annual. La investigadora y escritora Mª Rosa de Madariaga fue la encargada de abrir la tarde de ponencias en la que resaltó los lazos afectivos que unieron a El Jatabi con Melilla y que, según varias interpretaciones, parece que fue el motivo por el que nunca pensó en atacar la ciudad durante el conflicto con España.
Madariaga resaltó que mientras Abdelkrim estuvo en Melilla, entre los años 1907 y 1918, estableció lazos “especiales” y “afectivos”. Hecho que hizo que, posteriormente, no atacarra la ciudad no solamente por razones “sentimentales” sino también por razones “diplomáticas, porque generaría un conflicto internacional”, dijo.
Además, la investigadora destacó que El Jatabi tampoco reclamó en ningún momento las ciudades de Ceuta y Melilla en su objetivo de crear la República Independiente del Rif, “pedía que las tropas españolas se retiraran del todo el norte de Marruecos, pero no incluía a ambas ciudades” en su reivindicación. “No pone en cuestión el estatus jurídico de Ceuta y Melilla y esto es un punto muy interesante porque se ha hablado mucho sobre este tema”, apuntó.
En este sentido, Madariaga reconoció que existen muchos “prejuicios” en torno a Abdelkrim El Jatabi, pero que 90 años después hay que “descrispar la historia y es hora de que la veamos con la distancia suficiente, con el espíritu sereno y se analice sin crispación” este episodio de la historia.
Igualmente, Madariaga desmontó las corrientes que afirman que El Jatabi fue el autor de las matanzas como la de Monte Arruit, ya que, afirmó, “existen documentos en los que se muestra que Abdelkrim mandó emisarios para evitar la matanza, pero éstos llegaron tarde”. En relación a esta cuestión, aseguró que los autores de la matanza de Monte Arruit fueron los cabecillas de las cabilas cercanas a Melilla que escapaban al control de El Jatabi al no reconocerle como su líder.
Por otra parte, la investigadora no consideró que Abdelkrim fracasara en su intento de crear la República Independiente del Rif sino que, simplemente, esta idea “era difícil que cuajara, no tenía consistencia real en el momento histórico que se da porque formaba parte de Marruecos y no podía tener una independencia”.
“Nadie puede ser controvertido por luchar por su pueblo”
Las jornadas finalizaron con la proyección del documental francés de Daniel Cling que mostró la imagen más “emocional” del personaje de Abdelkrim El Jatabi a la vez que le reivindica como precursor de “los movimientos de nación nacionales”, según destacó el profesor Vicente Moga.
De hecho, El Jatabi reconoció que “había venido demasiado pronto” para conseguir su objetivo de instaurar una República Independiente del Rif, es decir, “para emancipar a su pueblo” y, por esta causa, Moga consideró que “nadie puede ser controvertido por luchar por su pueblo”.
Además, el profesor reconoció una gran virtud en Abdelkrim El Jatabi como fue el complementar ser un líder militar, “que infringió importantes derrotas al Ejército español y francés y casi consiguió sitiar Fez”, explicó, y un “hábil político”.
En este sentido, destacó una carta que envió a través de su hermano a las Naciones Civilizadas en la que pedía respeto a la identidad rifeña.