El tradicional rastrillo de verano que la asociación melillense Aspanies Feaps instaló ayer en la plaza Menéndez Pelayo fue un rotundo éxito gracias a las prácticas bolsas ecológicas que causaron furor entre los ciudadanos.
Al módico precio de un euro estas bolsas de tela, decoradas por los usuarios del Centro Ocupacional de Aspanies, se vendieron, literalmente, ‘como churros’ y al filo del mediodía no quedaban casi unidades. Otros de los objetos que mostraron en el mercadillo, a pesar del calor sofocante que acuciaba, fueron unos prácticos pisapapeles y libretas decoradas con diferentes motivos veraniegos. Además, el rastrillo recibió la visita de la consejera de Bienestar Social y Sanidad, María Antonia Garbín, y el viceconsejero de Servicios Sociales, Hassan Dris.