Aspanies Plena Inclusión ha celebrado este martes su tradicional mercadillo navideño en la Plaza Menéndez Pelayo y congregó a un buen número de personas que compraron sus productos, entre ellos el calendario de Gaselec que han elaborado junto a los miembros del Grupo de Regulares número 52 o la agenda anual, muy apreciada por los melillenses.
Carolina Arrarás, miembro de la asociación, explicó a El Faro que los productos navideños que se ponen a la venta para la decoración de las viviendas son elaborados por los propios jóvenes de la entidad. Prácticamente desde el inicio del curso escolar, estos chicos y chicas se dedican a fabricar toda clase de guirnaldas y adornos propios de estas fechas. "Desde prácticamente el mes de septiembre nos ponemos a organizar todo esto porque tiene mucho trabajo. Son muchas las cosas que hay que hacer y cada vez son más usuarios los que tienen que participar en los talleres para que al final el resultado sean estos productos tan chulos que nos ofrecen".
El mercadillo navideño de Aspanies estuvo en marcha ayer durante toda la mañana pero no seguirá abierto en los próximos días. Entre sus artículos estrella figuran este año el calendario de Gaselec, en cuyas fotografías aparecen los jóvenes de la asociación junto con miembros del Grupo de Regulares número 52 de nuestra ciudad. Asimismo destacan sus agendas, que son muy apreciadas por los melillenses. "Los calendarios son maravillosos y las agendas también nos las piden mucho junto con los productos que hacen ellos en los talleres".
Alrededor de las once de la mañana, el ambiente era notable alrededor del mercadillo, donde muchas personas se acercaban para realizar sus compras. "Es algo que tiene mucho tirón, gracias a Dios. Cada vez hay más y más expectación en Navidad", explicó Arrarás, quien añadió que solo se pone un día y que a la vuelta de las vacaciones los jóvenes empiezan a trabajar ya en el mercadillo de verano. "Solo tenemos dos al año", comentó.
Lo que más suele venderse, según reconoce Carolina Arrarás, son los calendarios. "Suele ser lo más llamativo y atrae mucho la atención pero en general lo vendemos todo muy bien porque los productos están hechos con mucho cariño y al final eso es lo que le llega a la gente".
Para verano, los trabajos suelen ser parecidos pero se encaminan más a cosas como bolsitos de playa o neceseres. "Se hacen cositas así más enfocadas a lo que es típico del verano".
En estas tareas participan absolutamente todos los chicos de Aspanies Plena Inclusión. "Trabajan del primero al último porque es un trabajo en cadena. Al fin y al cabo, nosotros, en Aspanies, de lo que se trata es de eso, que el trabajo de uno suple al otro y al final el resultado es tan maravilloso como siempre", finalizó.