La Policía Local de Melilla realizó, entre los días 20 y 26 de noviembre, una campaña especial de control y vigilancia de furgonetas, en cumplimiento de la programación llevada a cabo por la Dirección General de Tráfico (DGT) para el año 2023.
Se realizaron inspecciones sobre los vehículos (autorizaciones, condiciones técnicas y elementos de seguridad o tarjetas de transporte) y sobre los conductores (permiso de conducción).
Las furgonetas estuvieron implicadas en el 10% de los siniestros en nuestro país durante el año 2021.
Según recuerda la Policía Local, la conducción de una furgoneta no es igual a la de un turismo y el comportamiento dinámico del vehículo es diferente, sobre todo si va cargada. Asimismo es vital la sujeción de la carga, ya que cualquier desplazamiento de la misma incide en la estabilidad del vehículo por desplazamiento del centro de gravedad.
En este tipo de vehículos, es más alta la incidencia de salidas de la vía y vuelcos que puede explicarse por la excesiva o mala colocación de la carga.
A su vez, el riesgo en la conducción es mayor que en turismos, debido a la carga, a un menor equipamiento de seguridad activa y pasiva, además de la sensación de seguridad por el mayor tamaño del vehículo, la menor velocidad y la elevación de la cabina hace que el número de distracciones sea mayor y el uso del cinturón de seguridad menor.
La Policía Local participó en dicha campaña, llevada a cabo por DGT, a nivel local, con un resultado de 10 denuncias, de las 93 furgonetas controladas, por carecer el conductor del permiso reglamentario.