La Dirección Territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) en Melilla informa de que esta semana han comenzado las jornadas dedicadas a la “Formación en Escuela de Pacientes” en la que participan enfermería y educadores de pacientes. Asimismo, han estado invitados algunos pacientes para conocer su opinión sobre temas de salud.
Estas jornadas tienen como objetivos formar a los profesionales que serán “referentes” de la Escuela de Pacientes de Melilla para que puedan apoyar y facilitar a los pacientes formadores en sus talleres con otros pacientes.
Las jornadas se desarrollan durante este mes de octubre con cuatro módulos, una vez a la semana, dos de ellos presenciales y los otros dos de forma virtual.
El docente de esta actividad formativa es el facultativo especialista en Salud Pública Joan Carles March Cerdá, de la Escuela Andaluza de Salud Pública de Granada, quien ha hablado de las jornadas y cómo se puede mejorar con esas enseñanzas el sistema sanitario.
-¿En qué consisten las jornadas?
- Básicamente en qué se puede hacer desde los profesionales, pacientes y asociaciones para que los pacientes sepan ayudar mejor a otros pacientes, esa es la clave. Para eso tienen que tener la colaboración de profesionales y, también, los pacientes pueden aprender aspectos que puedan permitirles realizar una ayuda entre iguales que facilite el trabajo entre pacientes. La filosofía de todo lo que hacemos está basada en esa idea de “paciente activo, paciente experto” de la Escuela de Pacientes, en la cual lo que hacemos es fortalecer a los pacientes y a las asociaciones para que puedan hacer un mejor trabajo con otros pacientes. Ese es el concepto y esa es la idea.
-¿Qué diferencia hay con lo que se hace actualmente?
- Normalmente lo que se hace es trabajar des una perspectiva de profesionales que educan a pacientes, enseñan a pacientes, y en este aspecto, que es una cosa necesaria, imprescindible, que ayuda; pero, lo que hemos visto es que la participación de los pacientes permite avanzar en la línea de que “el hecho de que yo me sienta partícipe, me sienta activo de esa historia” hace que reduzca más el uso de los servicios sanitarios, colabore más con los profesionales y que estos estén mas coordinados.. Incluso que se confíe más en el sistema sanitario. Por tanto, todo lo que se avance en ese sentido es un aspecto muy importante para ayudar a mejorar el sistema sanitario.
-Para llegar a ello ¿qué se necesita?
- Es un proyecto muy basado en pacientes crónicos, por tanto, la clave está en pacientes que tienen una enfermedad durante una parte importante de la vida y lo que hacemos es facilitar que los pacientes tengan las claves, no tanto de conocimiento, de saber mucho de su enfermedad -que pueden saber más o menos-, sino que, básicamente, sepan qué hacer, cómo hacer las cosas, sepan cómo utilizar determinadas herramientas y aprendan de otras personas que tienen la misma enfermedad que ellos para ayudar a otras personas, esa es la clave: ayuda entre iguales y apoyo de profesionales para que los pacientes tengan el espacio de ayuda y encuentren la manera de colaboración entre ellos. Lo ideal es entre pacientes con la misma enfermedad, aunque también se puede hacer con otros pacientes que tienen otras enfermedades que, por el hecho de vivir algunos aspectos comunes a otros enfermos, ayuda y permite avanzar entre todos.
-¿Qué se necesita por parte del sistema sanitario?
- Básicamente, lo que tiene que hacer el sistema, o los profesionales es captar pacientes. El primer elemento a tener en cuenta es que se tiene que saber qué posibles pacientes pueden ayudar a otros. Estas personas tiene que tener las características de capacidad de ayuda, capacidad de relación con otros pacientes y un buen control de su enfermedad. Con esos tres criterios es suficiente. Y, desde los servicios sanitarios, desde las unidades y servicios clínicos, centros de salud… poner en contacto a diferentes pacientes. Y, al mismo tiempo, ayudarse de las asociaciones de pacientes. Por tanto, ese trío de asociaciones de pacientes, profesionales y pacientes puede favorecer una mejora del sistema sanitario, reconociendo por una parte cosas que les pueden ayudar y, dos, facilitando unos y otros coger una línea para mejorar su trabajo.