EL consejero de Medio Ambiente y Naturaleza, Manuel Ángel Quevedo, transmitió ayer una gran noticia para la ciudad Según dijo, espera que, para el año 2025, los cortes de agua sean historia en Melilla.
Seguramente es algo que la mayoría de los ciudadanos están deseando que suceda. No parece de recibo que, en pleno siglo XXI, se corte el agua por las noches por no tener el circuito eléctrico y de redes preparados ni el cuarto módulo de la desaladora instalado todavía.
Quevedo recordó que el PP lo dejó todo preparado en 2019, antes de abandonar el Gobierno local, para que estuviera a punto en 2022. Ahora que han regresado los populares, el consejero no quiere lanzar las campanas al vuelo, puesto que depende de factores externos, en este caso, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
De cualquier manera, tampoco pareció hablar Quevedo desde el reproche hacia nadie -dejando aparte el hecho de que ni la CHG ni la Delegación les hubiera avisado del próximo corte hasta hace unos días, con las complicaciones que ello ocasiona en estas fechas de verano y aproximándose la Feria- y ahora lo que toca es remar juntos para conseguirlo.
Sin embargo, Quevedo volvió a reclamar un traspaso de competencias en materia de agua -particularmente sobre la desaladora y el pantano de Las Adelfas- desde la CHG a la Ciudad.
Cree el consejero que la proximidad que tiene el Gobierno local con los ciudadanos melillenses ayudará a gestionar mucho mejor los problemas que se puedan dar en este campo. Opina que se puede acometer con más facilidad este asunto desde aquí que desde Sevilla, o desde Córdoba, donde ya bastantes problemas tienen con intentar salir adelante con los pantanos bajo mínimos y sin posibilidad de desalar agua.
De modo que este año habrá seguramente, por haber sido avisada tarde la Ciudad y no tener tiempo de almacenar la suficiente agua, cortes durante la Feria -lo cual se solía tratar de evitar por las molestias que se ocasionará a los propietarios de las casetas-, pero hay que confiar en que pronto, sea de la manera que sea, como anunció el consejero, llegue el momento en que los cortes de agua en Melilla no sean más que un recuerdo.