La consejera de Cultura, Patrimonio Cultural y del Mayor, Fadela Mohatar, ha destacado el compromiso del Gobierno para restaurar, rehabilitar y proteger el patrimonio cultural de la ciudad, uno de los grandes "tesoros" con los que cuenta Melilla y cuyo mantenimiento es de vital importancia.
Para trabajar en esta senda, Mohatar se reunió el pasado martes con el Colegio Oficial de Arquitectos de la Ciudad Autónoma de Melilla (COACAM). Un encuentro que se enmarca dentro de las reuniones que está llevando a cabo estos días con todas las asociaciones y entidades locales para ponerse al día de las relaciones, situaciones y proyectos que se tienen lugar en la ciudad.
En ese sentido, el COACAM forma parte de la Comisión de Patrimonio Artístico de la ciudad “con voz pero sin voto”, es decir, que está al tanto de todas las actuaciones urbanísticas que se hacen cuando hay un edificio declarado como elemento protegido, aunque no tiene potestad para decidir sobre ello.
Fadela Mohatar preside la Comisión que la integran la Fundación Melilla Ciudad Monumental, la Consejería de Fomento y el equipo de Patrimonio de la Consejería de Cultura. Cuando un edificio está protegido, la licencia de obra se envía a Fomento y este la manda a la Comisión para que desde un punto de vista histórico de su protección se proceda a autorizar la actuación y hacer las observaciones correspondientes.
“Nosotros nos hemos planteado en esta legislatura utilizar al máximo el funcionamiento de la Comisión de Patrimonio porque de ella depende el bienestar de la ciudad”, afirma la consejera. Los propietarios y promotores están a la espera de recibir las autorizaciones pertinentes, por lo que el órgano de la Comisión tiene que ser ágil. Ese, recuerda Mohatar, es “un compromiso” que este Gobierno se ha atribuido.
Recuerda la presidenta que antes las comisiones se estaban celebrando una vez a la semana, pero ahora, en una quincena ya se han reunido tres veces, atendiendo al compromiso de que la Comisión sea más ágil. También se ha reforzado el órgano de la Comisión con una arquitecta técnica que está apoyando en las labores.
“El Colegio de Arquitectos nos pide que esto sea más ágil todavía. Le hemos contado nuestro proyecto y lo que queremos, y nos han pedido agilizarlo al máximo”, dice Mohatar. Desde la Comisión se han comprometido a ella, reitera, además de reforzar toda la protección de nuestro patrimonio histórico y artístico.
En ese sentido, la consejera de Patrimonio Cultural hace hincapié en que se está actualizando el Plan Especial de Renovación Integral del centro modernista de nuestra ciudad. Para ello se van a llevar a cabo una serie de trabajos, porque la situación actual no es la misma que hace unos años: “las leyes han cambiado y los edificios están expuestos al deterioro”.
Hacerlo no es “trabajo fácil”, pero espera que en unos meses se haya realizado un diagnóstico de los más de 500 edificios modernistas que cuenta Melilla y que están repartidos por otros barrios de la ciudad (El Real, el Rastro…), además del centro.
“Vamos a actualizar ese PERI con todo el apoyo técnico y administrativo extraordinario. Vamos a contar con una partida importante para rehabilitación y vamos a generar con ellos los mecanismos necesarios para gestionar un tesoro como es nuestro patrimonio arquitectónico e histórico del Triángulo de Oro”.
Mohatar subraya que no pueden permitir que esa zona modernista desaparezca. Pone el acento en que hay algunos edificios que se encuentran en “serio riesgo” y hay que otorgarle a los propietarios las autorizaciones correspondientes para que puedan rehabilitarlos. “Vamos a apoyarles y facilitarles todas las herramientas que tenemos”.
Aunque también avisa de que se verán obligados a sancionar “a quien de forma deliberada ataque nuestro patrimonio". Dice que están convencidos de que propietarios y promotores tienen buena intención, pero si en algún caso “hay alguien que no quiera hacerlo o quiera sortear la protección de los edificios, vamos a actuar contra ellos porque, por ley, somos los responsables de ello. Es patrimonio de la ciudad”.
Por eso asegura que van a poner los medios, van a facilitar y van a poner a disposición de los propietarios una cantidad de presupuestos para que puedan rehabilitarlos. “Nuestro patrimonio forma parte de nuestra identidad. Es algo único y creo que tenemos que potenciarlo”.
Una vez que el catálogo de edificios modernistas esté actualizado, Mohatar afirma que la ciudad podrá tener “una herramienta” frente a “posibles distorsiones y atentados” contra el patrimonio, además de tener “más fuerza” para protegerlo.
La consejera de Patrimonio Cultural confiesa que una de las cosas que más preocupa a la Comisión son los diferentes templos de Melilla, como la Mezquita Central o la Sinagoga bicentenaria del Rastro, y que ahora se van a comenzar las reparaciones del Sagrado Corazón, la Medalla Milagrosa y la María Micaela. “Los templos son una columna vertebral de nuestro patrimonio histórico artístico. También queremos ver su situación, dónde estábamos, cómo estábamos”.
Fadela Mohatar recuerda que algo que han denunciado durante estos cuatro años ha sido el “escaso” mantenimiento que se ha destinado al Patrimonio Cultural de Melilla. Por ese motivo, el Gobierno ha decidido poner el nombre de ‘Patrimonio Cultural’ a la Consejería para “enarbolar y evidenciar que tenemos una preocupación real y que vamos a dedicar esfuerzos, trabajo y medios a ello”.
Un trabajo que será “triangular” con otras áreas de la ciudad que son igualmente importantes, como Turismo, Fomento, Medio Ambiente y la Fundación Melilla Ciudad Monumental. “Ya hemos constituido una primera comisión técnica con todas estas patas y personas que van a colaborar con nosotros para tener una imagen de todo lo que tenemos y actuar así de forma coordinada”.
Acuérdense del Fuerte de Rostrogordo al que los melillenses no podemos acceder porque incomprensiblemente se lo ha apropiado una entidad particular. Ahí no hay que gastar dineros, solo quitarles esa prerrogativa auto adquirida. Vamos a ver si se atreven ustedes.